1148 temas de desarrollo personal

Editorial 1068

 

Ciencia, filosofía, religión y espiritualidad.

Necesitamos armonizar la ciencia, la filosofía, la religión y la espiritualidad

La ciencia (medicina, psicología, economía, ingeniería, etc.) tiene como objetivo el estudio de los temas propios de cada ciencia. Se trata de conocer y dominar la naturaleza y utilizarla en beneficio de los seres humanos.

Como la vida es cambio y evolución, las ciencias y los científicos necesitan evolucionar constantemente para encontrar respuestas que ayuden a resolver los nuevos problemas que nos plantea la vida a nivel de salud, de economía, de convivencia, etc.

Las ciencias (astronomía, código genético, cerebro humano, naturaleza...) son un mundo inagotable de conocimientos que nos invita a trascender el mundo material y a ver la inteligencia infinita que guía todos los procesos.
Es importante que la ciencia, por sí sola, no puede resolver todos los problemas humanos.

 

La filosofía (filo = amor y sofía = sabiduría) Amor a la sabiduría.

Para los filósofos griegos, solo las personas sabias podían conocer la verdad y el bien; en consecuencia, solo las personas sabias podían ser virtuosas, mas, para ser virtuosas no bastaba con conocer la verdad y el bien, era necesario realizar la verdad y el bien.

La filosofía estudia los aspectos fundamentales de la vida, tales como: La existencia, el conocimiento, la verdad, la moral, la belleza, la mente, el lenguaje...

Existieron tiempos en que muchos filósofos importantes fueron a la vez grandes científicos, teólogos o políticos. En la actualidad, el incremento de la especialización hace que cada ciencia se centre exclusivamente en su objetivo específico. La especialización es necesaria, pero cuando se realiza a expensas de perder la visión general de la vida, corremos el peligro de desarrollar mentes rígidas y de vivir fuera de contexto.

La ciencia enseña a conocer el mundo y la filosofía ayuda a encontrar el sentido de la vida.

Creo que todos los seres humanos deberíamos tener un pensamiento científico y filosófico.

 

La religión. Es importante hacer una diferencia entre Religión e Iglesia.

La religión es un conjunto de verdades  basadas en el amor universal «Amar a Dios sobre todas las cosas y al prójimo como a ti mismo». La Religión tiene como finalidad unir al hombre con Dios y con los demás seres humanos. Explica el sentido de la vida y enseña el camino de la verdad y del bien.

Las iglesias son organizaciones humanas, como tales tienen fallos, por lo cual no podemos esperar que sean perfectas. Lo importante es que se encargan de enseñar las verdades de la Religión, y, gracias a ellas se conserva la fe en Dios y los valores.

 

Todo en la naturaleza se rige por leyes naturales. Si fallaran estas leyes sobrevendría el caos.

A lo largo de la historia, las religiones han sido las guardianas de las leyes morales que nos han permitido sobrevivir hasta el día de hoy. Según algunas estimaciones, existen alrededor de 4200 religiones vivas en el mundo. Esta abundancia de religiones se debe a que el ser humano es religioso por naturaleza, posee un sentido metafísico de la vida que le lleva a buscar su origen, la razón de su existencia y su destino. En este camino se topa forzosamente con la religión, con Dios (Principio y fin, Alfa y Omega). Por esta razón, a pesar de la aparente pérdida de la fe, apenas hay un 8% de ateos. Pero la fe en Dios sirve de poco, si no transforma la vida de los hombres. La esencia de la religión es el amor a Dios y el amor a los hombres, convertido en caridad, comprensión, tolerancia, perdón,...

 

El hombre de hoy, vive fascinado y ensoberbecido, debido a los avances de la ciencia y al progreso que prometen hacer un paraíso de la tierra. El hombre actual ha descubierto que se puede vivir sin Dios, como también se puede vivir sin principios, sin valores, sin moral y hasta, sin dignidad. El asunto está en saber hacia dónde conduce este camino; hasta cuándo puede sobrevivir la sociedad sin fe y sin valores, y, cuál es el precio que deberá pagar en forma de frustración y violencia, como consecuencia de esta concepción materialista de la vida.

 

En realidad no tiene porque existir incompatibilidad entre la ciencia, la filosofía y la religión, pues son partes de una misma realidad. El problema está en la actitud y en la programación mental de cada persona.

 

Espiritualidad

La vida de muchas personas es demasiado materialista. No está regida por principios y valores sólidos,  lo cual da origen a  frustración y vacío existencial. La frustración y el vacío existencial son el grito profundo de la naturaleza humana que pide rectificación, así como el dolor y la fiebre son señales de alarma que envía el cuerpo porque siente amenazada su existencia. Pero la gente prefiere aturdirse para no oír la voz de su conciencia.

 

La intuición  es la clave del éxito en la vida. La intuición se desarrolla trabajando con fe e ilusión en un proyecto importante, fortaleciendo la autoestima y los valores y dando a la  vida un sentido de misión y trascendencia; es decir, un sentido espiritual.  

Son muchas las personas, más de las que te imaginas, que llevan una vida espiritual rica y profunda, y, gracias a la energía espiritual que irradian estas personas, la sociedad evoluciona y evita caer en el caos.

 

La espiritualidad no consiste sólo en rezar, sino en salir del egoísmo y vivir en comunión con Dios, con las personas y con la naturaleza.

 

En vista de lo expuesto, necesitamos armonizar la ciencia, la filosofía, la religión y la espiritualidad. Podemos ser científicos, filósofos, religiosos y espirituales. Es la única forma de vivir plenamente y lograr la verdad, el amor, el éxito y la felicidad.