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Editorial 944

 


Tips - Cómo educar a los hijos

 

             
Lic. David Angulo de Haro
www.superaprendizajealfa.com
Tfs. 0212. 986 90 64 - 0414. 287 3512

 

  1. Tú hijo es único y posee cualidades únicas, por tanto, no lo compares con nadie.

  2. No le enseñes todo, déjale el placer de descubrir el mundo.

  3. No le corrijas excesivamente; concédele el derecho del error, porque sólo así aprenderá a usar su libertad.

  4. No le ayudes demasiado porque la sobreprotección genera personas incapaces que luego se convierten en frustradas y resentidas; por tanto, deja que ejercite sus capacidades y disfrute el placer de la acción.

  5. No premies con regalos el cumplimiento de sus deberes, porque además de corromper su conciencia le privarás del placer del deber cumplido.

  6. No llenes su vida de cosas ni su mente de necesidades; porque el día de mañana será esclavo de las cosas y tendrá dificultad para valorarse como persona.

  7. Enséñale a observar, analizar y razonar, porque el pensamiento es el único camino para crecer, madurar y alcanzar la libertad.

  8. Ofrécele sólo la parte buena de tu persona y evita proyectar sobre él, tus propios temores, complejos, angustias y frustraciones, para que tenga la libertad de decidir su propia vida.

  9. “Tu hijo no es tuyo; es hijo de la vida”. Por tanto, no deposites en él tus esperanzas ni ilusiones; porque él tiene sus propios proyectos.

  10. Deja que crezca y madure lentamente, disfrutando el placer de los juegos, porque los frutos más sabrosos son los que crecen lentamente, respetando el ritmo de la naturaleza.

  11. No le impongas tu ley ni tu disciplina; enséñale a tomar conciencia, porque la única ley que ayuda a crecer es la que nace de dentro.

  12. Despierta en él motivaciones de superación, porque ésta es la única forma de protegerle en la lucha de la vida.

  13. Ayúdale a adquirir criterios claros sobre los temas fundamentales (estudio, disciplina, libertad, familia, amistad,...) para que sepa protegerse de las trampas de la vida.

  14. Además de padre, sé amigo, porque sólo así tendrás acceso a los secretos de su corazón.

  15. En cuestión de principios, enséñale la verdad, la justicia, la tolerancia, el amor y la dignidad, porque ellos son la roca firme sobre la que podrá construir una vida segura y feliz.

  16. No pierdas tiempo en corregir sus defectos, porque no terminarás nunca. Motívale a la excelencia y los defectos desaparecerán como por arte de magia.

  17. Enséñale a responsabilizarse y a asumir las consecuencias de sus actos.

  18. Comprende sus defectos, porque ellos son parte del proceso natural de su desarrollo.No seas perfeccionista, porque esto genera angustia y estrés.

  19. Lo que no se resuelve a través del estímulo y del diálogo, no se resuelve de ninguna otra forma.

  20. Aunque sea un niño, respétale como a un adulto, para que crezca con autoestima y dignidad.

  21. Puedes exigirle disciplina y hasta castigarle, pero nunca humillarle, rebajar su autoestima o herir su dignidad, porque estos errores no pueden ser reparados.

  22. Escúchale cuando te hable y respeta sus opiniones; así aprenderá a respetarte y a respetarse.

  23. Exprésale con frecuencia el amor, la valoración y la confianza que le tienes, porque estas ideas y estos sentimientos son el alimento que hace crecer su espíritu.

  24. Enséñale a respetar las ideas de los demás y a comprender que cada persona tiene sus razones.

  25. Enséñale a ser sincero y fiel a sus principios y a sus sentimientos y a expresarlos con respeto pero con libertad.

  26. Conócete y conoce a tu hijo para que tus comportamientos sean siempre oportunos y correctos; de modo que tu hijo se sienta a la vez, libre y protegido.

  27. No trates de demostrar que eres un padre perfecto; tú hijo te prefiere de carne y hueso.

  28. Hazle entender que le amas por encima de sus errores, de sus defectos y de sus limitaciones.

  29. Recuerda que lo más importante no es lo que le dices o enseñas, sino lo que tú eres (lo que crees, lo que sientes, lo que amas y lo que haces).

  30. Evita toda comparación, porque genera soberbia, o bien, odio y resentimiento.

  31. Enséñale en qué radica el verdadero valor de la persona y en qué consiste el verdadero éxito, para que no le ocurra como a tantas personas, que fueron engañadas en su infancia y ahora viven frustradas.

  32. Enséñale a ser generoso, porque así producirá riqueza y también amor.

  33. Enséñale a tener un pensamiento amplio y universal; abierto a lo bueno de todos los hombres, de todos los pueblos, de todas las razas, de todas las religiones y de todas las clases sociales.

  34. Si logras que tu hijo asimile alguna de estas ideas, te aseguro que será una persona sabia, buena y feliz, porque tú has sembrado en su corazón las semillas de la verdad, de la justicia, del amor y de la libertad.

 

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