Editoriales

Editorial 938

 


Soledad - Aprende a convivir con la soledad

 

El hombre nace solo, vive solo y muere solo. La primera experiencia existencial, fuera del seno materno es la soledad. El niño necesita afecto, aceptación y seguridad para crecer como persona y llenar su corazón de autoestima; pero muchos niños sólo reciben migajas de afecto, de estímulo y de seguridad, lo cual genera un sentimiento de vacío y soledad.

 

La soledad no es una realidad física, por tanto no está en el exterior. Es una realidad mental que habita en el interior de cada persona. Podemos estar rodeados de personas y sentirnos solos, y podemas estar solos y sentirnos plenos y felices. El problema de la soledad se ha incrementado en las últimas décadas. Antes el ser humano vivía unido a un medio geográfico y social que le proporcionaban sentido de pertenencia, pero la movilización social, la transculturización, la apertura a nuevas ideas, valores y formas de vida, hace que muchas personas se sientan “perdidas en el espacio” La vida evoluciona de forma tan rápida que las personas y las cosas, que hasta hace poco nos resultaban familiares, ahora nos parecen lejanas y extrañas.


Cada persona percibe la soledad de acuerdo a como le va en la vida. Hay quienes la temen y la odian y hay quienes la aman y la desean.

 

La soledad es un estado mental que puede servirnos para encontrarnos con nosotros mismos, reflexionar, madurar, comprender el valor de la vida y planificar un futuro exitoso y feliz, o bien, puede ser un momento amargo, si dejamos que la angustia y los temores invadan nuestra mente.

 

Las personas vacías por dentro tienen terror a la soledad, porque la soledad produce un silencio que permite tomar conciencia de los fracasos y frustraciones. Por esta razón, la mayoría de las personas necesitan evadirse, aturdirse y olvidar, pues les resulta insoportable su propia existencia.

 

Cómo llega la soledad a la vida de las personas

 

En épocas pasadas todo era más estable (la vida, la familia, el trabajo, los amigos, los recuerdos, los acontecimientos...) Existía un gran sentido de pertenencia a un lugar, a un grupo social, a una cultura,... lo cual mitigaba la angustia existencial y el sentimiento de soledad. Hoy, las cosas cambian muy rápido, la gente emigra, la familia se dispersa y los amigos se van. Cambian las ideas y las costumbres y todo lo que nos es conocido y familiar se esfuma y desaparece. Es como si las personas despertaran en un mundo cada vez más estraño.

 

En vista de esta situación, las personas necesitan fortalecerse por dentro y llenarse de esos contenidos que dan sentido a la vida (ideas, amor, pertenencia a la familia, amistades, relación con la naturaleza, fe, esperanza, etc.)


Cuando las personas no se llenan de estos contenidos, van cayendo de forma progresiva en un existencialismo vacío que genera angustia y soledad. La soledad está muy relacionada con carencias sufridas en la infancia, con frustraciones no digeridas y con la pérdida de valores.

 

Cada día se impone con más fuerza la globalización económica y social, impulsada por fuerzas externas, pero no ocurre lo mismo con la globalización humana, afectiva, mental y espiritual, debido a que esta clase de globalización depende de fuerzas internas (respeto, amor, tolerancia, comprensión, generosidad, etc.) de los cuales estamos muy escasos.

 

La soledad es un sentimiento de vacío, más generalizado cada día, debido a la falta de desarrollo personal y al debilitamiento de las relaciones humanas.

 

El problema de la soledad tiende a incrementarse, especialmente entre jóvenes y ancianos, para quienes la soledad se ha convertido en una tragedia insoportable. Las drogas, el alcohol y otras muchas formas de evasión son un intento fallido de huir de la trágica soledad. En el mundo existen millones de jóvenes y de ancianos que mendigan como niños un poco de atención, de compañía y de amor.

 

La vida es un tiempo fugaz que se lleva todo lo que amamos (familiares, amigos, cosas, recuerdos, juventud, proyectos... Para evadir la angustia que genera la soledad, el hombre ha ideado muchas formas de ocupar el tiempo, tales como: La evasión a través de la fantasía, el juego, el trabajo, los clubes, las reuniones sociales, etc.

 

Cómo superar el problema de la soledad

 

La soledad no es una realidad física, es una realidad mental que habita en el interior de cada persona. Podemos estar rodeados de personas y sentirnos solos, así como podemos estar solos y sentir una plenitud total.

En una ocasión le preguntaron a Dalí si no se aburría estando tan solo, a lo que respondió: "No me aburro, porque siempre estoy con Dalí.

 

A mis soledades voy,
de mis soledades vengo,
porque para andar conmigo
me bastan mis pensamientos. Lope de Vega

 

Para superar la angustia de la soledad, necesitamos hacer amistad con las ideas y valores fundamentales de siempre. Gracias a estos valores, la humanidad ha llegado hasta el día de hoy y somos lo que somos. Estos valores son parte fundamental de nosotros por lo que no podemos renunciar a ellos sin alienarnos; lo que sí debemos hacer es adaptarlos a la nueva realidad, de modo que sean funcionales sin que pierdan en esencia.

 

En nombre del progreso muchas personas echan por la borda principios, costumbres, valores, tradiciones,... vaciándose de su propio ser.


Es importante entender que el ser humano es esencialmente siempre el mismo y que sus necesidades fundamentales son siempre las mismas, de modo que, antes de renunciar a la herencia de tus ancestros e internarte en un mundo moderno, desconocido y dudoso, piénsalo dos veces, porque no siempre lo más moderno es lo mejor.

 

Conserva la capacidad crítica y mantente alerta, porque vivimos en una sociedad ignorante y mediocre que marca pautas y trata de imponer sus criterios como una forma de justificar sus actitudes y su forma de vida.

 

La soledad solo existe en el corazón de las personas cuya vida carece de significado y de trascendencia. Las personas que viven una vida plena no tienen tiempo ni espacio para la soledad.
Si sufres de soledad, algo anda mal en tu vida. Rectifica.

 

 

Recomienda Este Editorial
 
    Lic. David Angulo de Haro

 

 

 

 

 

 

comments powered by Disqus