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Editorial 919

 


Cómo centrifugar la mente y liberarse
de tabúes, temores, culpas, prejuicios y de hábitos negativos o ineficaces.


A lo largo de los siglos, se han transmitido de generación en generación, ideas, sentimientos, hábitos, temores, tabúes y prejuicios que condicionan la mente de las personas y les impiden crecer, aprender, triunfar y ser felices. Estos contenidos se transmiten de forma inconsciente de padres a hijos, por lo que, ni los padres ni los hijos tenemos conciencia de esta herencia perversa que nos afecta en todos los aspectos de nuestra vida.

 

Más del 90% de nuestros contenidos mentales son datos obsoletos transmitidos de generación en generación, y más del 90 % de lo que hacemos todos los días no obedece a proyectos creativos de desarrollo, sino a hábitos obsoletos e ineficaces.
La humanidad progresa mucho, debido a que la materia es manipulable y porque existen unos cuantos genios que dan la cara por la humanidad, pero la evolución es muy lenta, porque el peso de la historia es inmenso.

 

Las personas quieren liberarse de muchas conductas negativas pero no lo consiguen, porque están atrapadas en programaciones y en hábitos consolidados a lo largo de los años. Es como si giraran como autómatas en una órbita de cuya atracción no pueden liberarse.

 

La humanidad ha evolucionado a lo largo de cuatro millones de años y los seres humanos han desarrollado un cerebro de genio, que, si es bien programado a nivel cognitivo y emocional puede alcanzar objetivos increíbles.

 

Los seres humanos estamos programados genéticamente para buscar la verdad, el bien, el amor, la libertad y la felicidad.  Somos como las semillas que llevan dentro de sí todo lo necesario para convertirse en árboles frondosos y fructíferos.


No necesitamos que nadie nos dé nada, porque todo lo que necesitamos lo tenemos dentro de nosotros, sólo necesitamos que no nos repriman y que nos estimulen y orienten; a partir de ahí todo depende del uso de libre albedrío que haga cada persona.

 

Ahora bien, los seres humanos estamos atrapados en ideas, sentimientos, hábitos, temores, tabúes y prejuicios que forman parte de nosotros, de los cuales tenemos muy poca conciencia, lo que nos impide reconocerlos y extirparlos. Ésta es una de las razones por la cual las personas, a pesar de sus buenos deseos de renovación, siguen actuando de la misma forma.

 

Cómo centrifugar la mente para liberarnos de ideas, de temores y de hábitos obsoletos y negativos.


Existen fuerzas centrífugas y fuerzas centrípetas: Las fuerzas centrífugas tienden a alejarse del centro, a desintegrarse; mientras que las fuerzas centrípetas se dirigen hacia el centro, tienden a cohesionarse.

 

Las lavadoras automáticas, cuando terminan de lavar, desarrollan un movimiento rotatorio con una fuerza mayor que la de la gravedad y exprimen la ropa.
De forma similar, el método de Súper Aprendizaje Alfa, creado por el Lic. David Angulo de Haro tiene como objetivo liberar la mente de ideas, sentimientos, hábitos, temores, tabúes y prejuicios, a través de ejercicios realizados contra reloj. A medida que las personas adquieren fluidez mental, el cerebro elimina los contenidos mentales negativos (centrifugación) y fortalece los contenidos valiosos (autoestima, seguridad, inteligencia, motivación, etc.)


La velocidad de la que hablamos no tiene nada que ver con la prisa y el estrés, se trata de una fluidez mental natural que surge como resultado de eliminar una carga inmensa de basura mental (paradigmas, angustias, temores, culpas, prejuicios, preocupaciones, etc.) y centrarse en cosas importantes.

 

A medida que las personas se familiarizan con "Súper Aprendizaje Alfa" drenan su mente y adquieren alto desarrollo cerebral que se traduce en alto rendimiento.

• Se vuelven más inteligentes. 
• Se liberan de temores, angustias y preocupaciones. 
• Tienden a ser más tranquilas, seguras y felices.
• Estudian por motivación propia y disfrutan el placer de aprender y de superarse.
• El aprendizaje se hace más fácil, agradable y efectivo. 
• Pueden procesar gran cantidad de información en poco tiempo.
• Aprenden y recuerdan con rapidez.
• Se expresan con claridad y precisión.
• Tienen más conciencia del valor real de las cosas, autoestima y seguridad. 
• Quienes siguen el método de "Súper aprendizaje Alfa tienden a convertirse en líderes. 

 

Las personas que no tienen acceso al método de Súper Aprendizaje Alfa, pueden centrifugar su mente aprendiendo a simplificar las cosas, a ser más eficaces, a ser más seguras y fluidas en todos los aspectos, a establecer prioridades, a ser disciplinadas y perseverantes, etc.

 

Aplícate el siguiente ejercicio.

1. Dibuja una circunferencia de unos 15 centímetros de diámentro.
2. Repása esta circunferencia tratando de no salirte de la línea y cuenta el tiempo que tardas en repasarla.

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No leas lo que vine al pie de la página hasta después de repasar la circunferencia, porque el ejercicio quedaría invalidado y perderías la oportunidad de saber cómo funcionas.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Evaluación.

 

Deberías haber repasado la circunferencia en medio segundo, pero has tardado varios segundos debido a que tu cerebro funciona a un ritmo lento impuesto por la sociedad, y además has estado preocupado por no salirte de la línea, debido a que en tu cerebro llevas impresa la orden de "prohibido equivocarse" Esta orden se activa cada vez que intentamos realizar algo importante. Es una forma de controlarnos y de condicionarnos.

 

El tiempo que has tardado indica el grado de temor y de represión mental que oprime tu mente.

 

Libérate, libérate, libérate. Se trata de un simple juego.
Toma el lápiz por la mitad de su altura y repasa la circunferencia a toda velocidad, cinco vueltas en cinco segundos. Si te sales algo de la línea no importa. Cuenta el tiempo.

 

Puedes repetir el ejercicio hasta que logres repasar 10 veces en 5 segundos.
Después de un poco de entrenamiento, todas las personas pueden lograr este objetivo de forma fluida y relajada.

 

La lentitud mental es un obstáculo añadido para triunfar en la vida. La lentitud hace que las personas presten atención a cosas superfluas y tengan dificultad para distinguir lo importante.

 

Las personas que desarrollan velocidad, ritmo y control mental, son tranquilas, seguras y relajadas, porque sienten que poseen el poder de pensar, de crear y de resolver con rapidez y eficacia.


Vivimos en un mundo dinámico y cambiante. La información fluye a gran velocidad y el cerebro humano necesita aprender a percibir sólo lo esencial y a procesarlo con rapidez y precisión. Sin embargo la mente de la mayoría de las personas funciona a la velocidad del burro. Por esta razón no funciona la educación, la política, las empresas, etc. pues, si bien tenemos un cerebro de genios, estamos atrapados en una dinámica obsoleta y carente de sincronización.

 

La velocidad de la que hablamos, no tiene nada que ver con la prisa. Se trata de un proceso mental natural que todos podemos desarrollar.

 

 

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    Lic. David Angulo de Haro

 

 

 

 

 

 

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