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Editorial 905

 


Cómo hacer amigos

 

Para ganar amigos, tienes que ser amigable. 

Por lo común, el concepto de ganar algo se relaciona con la obtención de un beneficio o ventaja, de triunfo o prosperidad. Pero nada de esto puede conseguirse sin amigos; por lo que te conviene adquirir la habilidad de ganar amigos y conservarlos 

Una actitud es una forma de ser, un estado de ánimo habitual. Algunos creen que modificando una actitud se puede aprender a ganar amigos. Pero más que hacer ajustes en una actitud en particular, la verdadera cuestión consiste en trabajar en un patrón de actitudes, es decir, en una forma habitual de ser.

Un patrón (en inglés, "standard") es un modelo o sistema a partir del cual se produce todo lo demás, (servicios, ideas o actitudes, etc) . Por ejemplo, si "soy una persona amargada", todas mis actitudes brotarán a partir del modelo o standard que me he fabricado, y mi tendencia en casi toda ocasión será a reaccionar con fastidio ante cualquier estímulo. En otras palabras, mis actitudes estarán teñidas de amargura.

"Yo soy así, siempre he sido así. ¿Cómo cambiar?" 

No pienses en cambiar todo de golpe, pues se trata de un proceso muy complejo que exige cambios estructurales, los cuales necesitan consolidarse poco a poco, lo importante es avanzar en la dirección correcta. 

¿Por dónde comenzar? 

Te será más fácil ganar amigos si aprendes algunos principios que rigen las relaciones humanas, además de motivarte positivamente y hablar con entusiasmo. Si los cumples, tendrás todos los amigos que desees, y si violas estos principios, los perderás, porque la amistad verdadera se edifica sobre cimientos que soportan los terremotos emocionales. 
Cuando pierdes un amigo, en realidad pierdes mucho más, porque su huida significa el fracaso de una relación debido a tus malas actitudes. 

Las palabras que menos se usan en Internet 

"Por favor" o "gracias". Las personas simplemente piden lo que quieren, y, más bien, lo exigen. Sienten que se merecen todo y que no tienen que agradecer a nadie. Sin duda, se trata de una falla grave de educación.
Por eso, la próxima vez que oigas a personas quejándose, diciendo que se ha perdido la confianza, que la gente es egoísta, que la gente es hipócrita, etc. etc. lo más seguro es que estés ante una persona frustrada, víctima de sus propios actitudes negativas. No ha aprendido, a pesar de los golpes de la vida. Cree que "es así, y nunca va a cambiar"
Recuerda: Para tener amigos, hay que estimular, motivar y felicitar a las personas por el esfuerzo que hacen, por pequeño o insignificante que parezca, y usar a menudo frases "por favor" o "gracias"

 

Ser exigente e inflexible te aísla de los demás y te vuelve una persona poco comprensiva, poco compasiva y rígida. En consecuencia eres propenso a criticar, a juzgar y a condenar, o lo que es lo mismo, a herir los sentimientos de los demás. En estas condiciones lo único que puedes recibir es el desprecio y el rechazo.

 

Si una persona es mezquina con su cariño, sin duda se hundirá en una profunda soledad y no tendrá a nadie que le pregunte: "¿Cómo estás?" "¡Me da gusto verte!". Porque no les importarás. Es la ley natural de la vida. Según la Ley de Correspondencia cada quién recibe lo que da. 

Si quieres ganar amigos, tienes que comenzar por ser amigable y pensar buenas cosas de las personas. Apreciar su esfuerzo, mostrarles comprensión más bien que ser exigente, interesarte sinceramente en sus necesidades, ser una persona generosa, y sobre todo, respetar su derecho a la privacidad. Porque la amistad es como un puente que conecta a las personas entre sí, y como todo puente, necesita mantenimiento para no derrumbarse al menor soplo del viento. 

Y si encuentras a alguien que siempre se queja de todo, recuerda que probablemente es de los que tienen un corazón de piedra, de los que "son así, siempre han sido así y NUNCA van a cambiar". Son un pésimo modelo de ser humano y una presencia negativa, de la que debes alejarte por muchas razones.

Recuerda que lo importante es darle mantenimiento a tu personalidad haciendo pequeños ajustes cada día, aquí y allá.

 

Los seres humanos somos como imanes magnetizados que emitimos vibraciones y tenemos el poder de atraer o de rechazar a las personas según el signo de nuestras vibraciones. Si vibras en positivo tendrás el poder de atraer hacia ti a las personas que vibran en tu misma frecuencia.

 

Todo en la naturaleza se rige por leyes. Una de estas leyes es la Ley de Asociación o Atracción. Esta ley está impresa en los átomos, en las células y en los organismos. Hace que todo lo que existe tienda a asociarse de acuerdo a sus características. De modo que, sin quieres hacer buenos amigos debes comenzar por ser buena persona, por ser amigo de ti mismo. Cuando estés en paz y en amistad contigo mismo, llegarán a tu vida buenos amigos.

 

 

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    Lic. David Angulo de Haro

 

 

 

 

 

 

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