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Editorial 882

 

Ganar - Ganar

 

En la naturaleza todo es un derroche de creatividad, de abundancia y de generosidad. Las plantas dan sus frutos, las nubes regalan la lluvia y las estrellas su luz, sin pedir nada a cambio, pero los seres humanos siempre buscamos nuestro provecho, porque no entendemos la Ley de Dar, porque estamos saturados de temores de inseguridad y de egoísmo.

 

La vida es energía que fluye de muchas formas; en forma de salud, conocimiento, amor, amistad, etc. Para entrar en esta corriente de energía y beneficiarnos de todos los bienes que ofrece la vida, necesitamos dar lo mejor de nosotros.

 

Según esta ley, es lo mismo dar y recibir, porque el universo fluye de esta manera y los seres humanos podemos cumplir la Ley de Dar, aprendiendo a dar todo aquello que buscamos recibir. Si buscas amor, tienes que dar amor; si buscas prosperidad, tienes que ayudar a otros a que sean prósperos, si quieres encontrar amigos, tienes que dar amistad, porque todo se rige por la Ley de Acción y Reacción, según la cual, cada uno recibe de acuerdo a lo que da, cosecha de acuerdo a lo que siembra, hace amigos de acuerdo a la amistad que da, gana de acuerdo a como produce, y es feliz de acuerdo a los sentimientos que cultiva. De aquí el sabio refrán: "Haz bien y no mires a quién"

 

La Ley de Dar no se refiere a dar cosas sino a dar lo más valioso de sí, como son: El saber, la verdad, el amor, la comprensión, etc. pero nadie puede dar estos dones si no los posee y nadie los posee si no los cultiva.

 

El temor a perder, la inseguridad y el egoísmo, son sentimientos que dominan en las personas, por lo que sólo pensamos en ganar nosotros, en nuestro propio provecho, y, como todos estamos en el mismo plan, caemos en la competencia despiadada que rige la vida. Al final, este error lo pagamos todos de muchas maneras.

 

El concepto "yo gano y tu pierdes" o "yo pierdo y tu ganas" hace que las personas perdedoras se sientan frustradas y se pongan a la defensiva, esperando el momento oportuno para desquitarse. Esta actitud genera una guerra sin cuartel que perjudica las buenas relaciones. El "Sálvese quien pueda" es un grito prehistórico, propio de la época de las cavernas. Un grito que activa los peores sentimientos y exalta la ley de la selva; mientras que, "yo gano y tú ganas", favorece las buenas relaciones, el espíritu de cooperación, la paz, la armonía y el progreso.

 

Somos conscientes de que vivimos en un mundo injusto y violento, pero, sin que importe lo que hagan o dejen de hacer los demás, lo ideal es vivir y actuar de acuerdo al concepto "yo gano y tu ganas" porque al final, a cada quien le va de acuerdo a como actúa.

Es importante que las personas que se relacionan con nosotros perciban nuestra honestidad y generosidad, pero, como existen personas aprovechadoras, debemos se sagaces y no pecar de ingenuos. Debemos saber elegir relaciones y amistades.

 

"Ganar-ganar" es un concepto aplicado a los negocios, pero debemos aplicarlo a todos los aspectos de la vida. Esto significa que debemos sopesar la forma en que invertimos la energía, el tiempo, los afectos, el dinero, etc. Conscientes de que si hacemos bien las cosas, entonces, (por Ley de Compensación y por Ley de Causa y Efecto) el éxito, la libertad, la paz, la amistad, la felicidad y todos los bienes de la vida, vendrán a nosotros.

 

"Ganar- Ganar" significa ser personas proactivas. La proactividad es una actitud en la que el sujeto asume el control de su conducta de forma activa y actúa de forma creativa y audaz con el fin de mejorar las cosas. No espera que las cosas cambien sino que crea las condiciones para cambiarlas.

 

Proactivo significa: Afirmativo, lógico, ético, estimulante, inteligente, persuasivo, convincente, comprensivo, tolerante, solidario, productivo, eficaz, exitoso, feliz. Ausencia de duda, ignorancia, queja, culpa, crítica, envidia, temor, egoísmo, agresividad y mentira.

 

Existen personas reactivas. Las personas reactivas viven a la defensiva. Dependen de las circunstancias externas sobre las que no tienen ningún control. Carecen de proyectos y no tienen la libertad de elegir sus propias acciones. Esta actitud les conduce al fracaso y a la frustración

 

Las personas proactivas tienen valores sólidos y bien seleccionados. Tienen un proyecto de vida importante y la determinación de llevarlo adelante. No dependen de las circunstancias sino de sus propias decisiones. Como es lógico, las personas proactivas trabajan constantemente en capacitarse y en desarrollarse como personas, porque están conscientes de que el éxito, la libertad y la felicidad nacen de dentro.

 

La proactividad no tiene nada que ver con la prisa o la hiperactividad; más bien, las personas proactivas son muy tranquilas, tanto física como mentalmente, pero son muy fluidas y eficaces en las ideas y en la acción.

 

La personas proactivas viven de acuerdo al concepto "Ganar- Ganar" Se esfuerzan en ser mejores personas y tratan de cambiar las cosas para bien de la humanidad.