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Editorial 824

 

Libros de auto ayuda

Existen libros extraordinarios de auto ayuda que tienen el poder de aclarar la mente, despertar la conciencia y estimular a la superación, pero también existen muchos libros que carecen de contenido sustancioso y de ideas fuerza, lo que hace que las personas a pesar de sus esfuerzos se sientan desorientadas y frustradas, porque no encuentran en la lectura el impulso que esperaban.

No compres libros por lo que opina la gente. Antes de comprar un libro lee varios párrafos al azar, y compra el libro sólo si sientes que te transmiten la fuerza y la orientación que estás buscando. No se trata de leer muchos libros, sino de leer libros buenos, de volver a leerlos, reflexionar y extraer la sabiduría que contienen.

Hay dos formas de vivir. Vivir a la deriva, a la espera de que ocurran las cosas o vivir con objetivos claros y trabajar para que se hagan realidad.

También hay dos formas de trabajar: Trabajar para sobrevivir o trabajar para ser protagonista de algo bueno, para triunfar y para dejar huella en la vida.

También hay dos formas de viajar. Viajar a lo que venga o viajar hacia un destino.

También hay dos formas de leer. Leer sin una intención determinada o buscar ideas para resolver cosas concretas, lo cual ayuda a enfocar la mente y a centrarse en lo que es importante.

Por razón de mi trabajo oigo muchos comentarios de personas que a pesar de leer muchos libros de auto ayuda no ven premiado su esfuerzo y sienten que se mueven en un círculo vicioso.

Las personas que viven a la deriva y quienes trabajan para sobrevivir, carecen de fuerza mental para lograr cambios significativos a través de los libros de auto ayuda. Los libros pueden ser extraordinarios y contener mucha sabiduría, pero las personas tienen bajo nivel de evolución o de preparación, por lo cual, no pueden captar las ideas profundas que son las que nutren y ayudan a cambiar la vida. Además, las ideas no tienen poder para cambiar la vida hasta que no se convierten en convicción y en acción eficaz.

Los seres humanos percibimos y aprendemos por analogía. Analogía significa semejanza. La analogía es la base del conocimiento. Gracias a la analogía o semejanza que existe entre las cosas podemos aplicar el conocimiento y la experiencia de unas cosas a otras. Sólo podemos aprender aquello que se relaciona de alguna forma con lo que ya sabemos. Esta es la razón por la cual todo aprendizaje nuevo resulta lento y difícil, y es también la razón por la que resulta difícil cambiar.

Los seres humanos creemos que tomamos decisiones libremente, pero las cosas no son así. Tenemos programaciones a nivel subconsciente, grabadas desde la infancia, las cuales se han ido modificando o consolidando a través de los años.

Estas programaciones subconscientes constituyen la estructura profunda de nuestra personalidad y son las que determinan nuestras conductas. Esto explica por qué muchas veces queremos hacer algo pero actuamos de una forma muy distinta. Se debe a que nuestro poder consciente es débil ante la dinámica poderosa de la mente subconsciente.

Tenemos numerosos paradigmas (ideas, creencias...que no responden a la realidad) los cuales condicionan la mente y nos impiden avanzar hacia el éxito y la libertad. Estos paradigmas escapan al propio análisis crítico, de modo que no podemos percibir su incongruencia. Estos paradigmas hacen que las personas sean pobres, sumisas y temerosas. Es necesario realizar una higiene mental, liberar la mente de frenos y obstáculos y avanzar hacia el éxito, la libertad, la riqueza y la calidad de vida.

Al programar la mente en positivo, se activan los mecanismos de desarrollo, se incrementa la inteligencia, la motivación y la creatividad, de modo que, en vez de percibir la vida como un problema, se percibe como una oportunidad.

Cuando las personas comprenden lo importante que es algo para su vida, el cerebro se activa, lo graba rápidamente y entra a formar parte de la dinámica de su vida. El problema está en que las personas viven atrapadas en una forma de pensar repetitiva y no ven las soluciones aunque estén delante de sus narices. Por esta razón las personas son tercas, cometen los mismos errores y siguen repitiendo las mismas conductas a pesar de que son ineficaces.

Casi todas los programas de auto ayuda están orientados a cambiar la mente por medio del esfuerzo consciente, lo cual resulta difícil y poco efectivo, porque las raíces de la conducta humana no están en el consciente sino en el subconsciente; por tanto, hay que llegar al subconsciente para producir allí cambios profundos y reales a nivel de creencias, sentimientos y conductas. Para lograr estos cambios es necesario aplicar la inteligencia, la fe, el manejo de las emociones, la autosugestión, la meditación, la oración, la lectura programada, acciones concretas, mejorar los criterios sobre aspectos importantes de la vida, etc.

Los libros de auto ayuda deben ser de lectura fácil, agradable, práctica, convincente, persuasiva y estimulante.

Los libros de auto ayuda son muy teóricos, y, con sólo ideas no cambian las cosas. Lo mismo ocurre con los cursos de de desarrollo humano. Las personas salen eufóricas y emocionadas, con ganas de comerse el mundo, pero, a los pocos días terminan desinfladas, llenas de deseos pero en el mismo punto de partida.

Viajan con más ideas pero en el mismo carro mental. Un carro viejo y lento.

La lentitud mental es un obstáculo añadido para triunfar en la vida. La lentitud hace que las personas presten atención a cosas superfluas y tengan dificultad para distinguir lo importante.

La velocidad induce al cerebro a funcionar en estado Alfa, lo cual facilita la a asimilación rápida de los hechos, debido a que participan en el aprendizaje los dos hemisferios cerebrales; el hemisferio izquierdo (lógico y racional) y el hemisferio derecho (creativo y asociativo)

Vivimos en un mundo dinámico y cambiante. La información fluye a gran velocidad y el cerebro humano necesita aprender a percibir sólo lo esencia l y a procesarlo con rapidez y precisión. Las personas que desarr ollan velocidad, ritmo y control mental, son tranquilas, seguras y relajadas, porque sienten que poseen el poder de pensar, de crear y de resolver con rapidez y eficacia.

La velocidad de la que hablamos, no tiene nada que ver con la prisa. Se trata de un proceso mental natural que todos podemos desarrollar.

Los libros de autoayuda deben ir acompañados de dinámicas que ayuden a liberar la mente de ideas, criterios, creencias, sentimientos, actitudes y conductas que no responden a las verdaderas necesidades y valores de la vida.

Las acciones aisladas no resuelven, es necesario trabajar sobre un proyecto de vida en el que las ideas y la acción se centren en objetivos importantes.

Cuando pensamos en algo (positivo o negativo) lo alimentamos y tiende a fortalecerse. Cuando pensamos en ello con insistencia, incrementamos su poder. Cuanto más poder adquiere una idea o un sentimiento, se impone con fuerza sobre las demás ideas y sentimientos, hasta llegar a tomar el control de la mente. Como es lógico, la persona tenderá a actuar de acuerdo a las ideas y sentimientos que se imponen en su mente.

El ser humano tiende hacia el libertinaje por lo que necesitamos estar alerta, controlar constantemente los instintos y alimentar los valores e ideales, pues la sociedad genera mucho desgaste psíquico y moral.

Los buenos lectores leen libros buenos y tienden a convertirse en líderes.

"Dime qué lees y te diré quién eres" Refrán.