Editoriales

Editorial 540

 


Control de la violencia

 

Nadie nace violento. La violencia es una conducta aprendida como respuesta a situaciones o estímulos que atentan contra nuestra seguridad. La actitud violenta se va desarrollando poco a poco, hasta que termina convirtiéndose en un hábito. Las personas violentas creen que su comportamiento es normal, por lo que siempre encuentran razones para justificar su violenta.


El ser humano posee mecanismos de desarrollo que le impulsan a a crecer, a ser creativo, a salir de sí y a relacionarse con los emás. Gracias a estos mecanismo la humanidad evoluciona hacia formas de vida superior. Pero, el ser humano también posee mecanismos de defensa ; son lo opuesto a los mecanismos de desarrollo. Son conductas instintivas, su objeto es la supervivencia; proceden de la mente reactiva. La mente reactiva es instintiva. Ante cualquier amenaza el ser humano tiende a actuar de forma violenta, generando conductas desadaptadas, ineficaces y conflictivas.


El objeto de la educación es activar los mecanismos de desarrollo y controlar los mecanismos de defensa. Cuando se impone la violencia, se debe a fallas en el proceso educativo. No se han fortalecido los mecanismos de desarrollo (principios, valores, criterios, disciplina, responsabilidad,...) y no se ha enseñado a controlar los mecanismos de defensa (control de las emociones, manejo de las frustraciones, conciencia del deber, respeto al otro, etc.)


A pesar de los millones de años de evolución, seguimos siendo animales, con instintos primitivos, los cuales viven agazapados y pueden surgir en cualquier momento. Por esta razón, los seres humanos necesitamos vivir alerta. Se supone que invertimos más del 70% de nuestra energía mental en controlar los instintos, debido a que suponen una amenaza permanente. Esta actividad es subconsciente, por lo cual, no tenemos conciencia de ello.


La violencia actual viene de muy lejos, obedece a grabaciones mentales que hunden sus raíces en la prehistoria, las cuales se transmiten de generación en generación, a través del subconsciente familiar y del subconsciente colectivo. Sin embargo, existen técnicas de programación mental que ayudan a cambiar esta historia.


La Segunda Guerra Mundial trerminó hace más de sesenta años y gracias al Plan Marschall patrocinado por EE.UU. se reconstruyó Europa y se reactivó la economía, pero aún perduran las secuelas del desatre psicológico, social, moral y espiritual que dejó la guerra. Estas secuelas se transmiten de generación en generación de muchas formas. Las guerras de hoy y la violencia de hoy, no son más que formas de reacción a sentimientos de temor, injusticia, fracaso, frustración, ira, rabia, odio, resentimiento, etc. grabados en la mente de las personas como consecuencia de una educación errónea.


Puesto que la raíz de la violencia está en la mente de las personas es en la mente donde debemos producir el cambio. Se trata de cambiar ideas y sentimientos. Se trata de cambiar la visión de las cosas, de cambiar de actitud, y de entender que el único camino hacia la paz interior y social es el diálogo y la reconciliación. Si se impone la ley del talión: "Ojo por ojo y diente por diente" lo más probable es que todos terminemos ciegos y desdentados. Lo cual no beneficia a nadie.

 

Necesitamos establercer una ley que beneficie a todos, de lo contrario, siempre existirá la violencia. "La justicia es el nuevo nombre de la paz"



competencia crisis, ley de los contrarios...
intereses
poca conciencia, principios y valores
programac ión
deberían gobernar los capaces, sabios, probos...pero
Las crisis y el caos son oportunidades cambiar estructuras
434 libertinaje
318 parte oscura de la mente
400 más alla del bien y del mal
419 cón se genran los problemas





Cambio de programación. En nuestra mente existe una lucha de ideas, sentimientos, deseos, instintos, valores, etc. Al final se imponen los contenidos que más alimentamos. Cuando pensamos en algo (positivo o negativo) lo alimentamos y tiende a fortalecerse. Cuando pensamos en ello con insistencia, incrementamos su poder. Cuanto más poder adquiere una idea o un sentimiento, se impone con fuerza sobre las demás ideas y sentimientos, hasta llegar a tomar el control de la mente. Como es lógico, estas ideas y sentimientos determinan la dirección de nuestra vida.
Haz amigos, no enemigos.


Recomienda Este Editorial
 
    Lic. David Angulo de Haro

 

 

 

 

 

 

comments powered by Disqus