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Editorial 430

 

Cómo aprovechar al máximo el cerebro

 

El cerebro pesa un kilo y medio, representa el 2% del peso del cuerpo, pero su actividad es tan intensa y compleja que consume el 20% de la energía que produce el ser humano.

El cerebro tiene alrededor de mil millones de neuronas y cada neurona establece en promedio 1.000 conexiones con otras neuronas, sumando un total de 1 billón de conexiones, las cuales están siempre activas, transmitiendo información.

Produce más de 4000 millones de impulsos por segundo.

Su actividad es básicamente subconsciente. El cerebro controla cada uno de los órgamos, glandulas, hormonas, células, etc. y hace que funcionen de forma perfecta y sincronizada. Durante el día, el cerebro procesa los datos que le llegan a través de los sentidos. Cada día procesa billones de datos. Esta actividad la realiza a nivel subconsciente. Sirve para vivir alerta, evitar peligros y sobrevivir.

Nosotros sólo somos conscientes de una mínima parte de lo que ocurre en nuestra vida. Somos conscientes de algunos aspectos que son necesarios para la adaptación a la realidad, para resolver las cosas y satisfacer nuestras necesidades.

En realidad el gran protagonista de nuestra vida es el subconsciente. El subconsciente es el disco duro de la mente, contiene todas las grabaciones de nuestra vida y nos proporciona la materia prima que necesitamos para pensar, aprender, crear respuestas y tomar decisiones.

El subconsciente es como un iceberg, del cual sólo conocemos el pico, que representa una octava parte del iceberg, lo que significa que existen muchos aspectos de nuestra personalidad que no conocemos y que pueden ser fuerzas que nos lleven al éxito o al fracaso.

El cerebro no descansa de día ni de noche. De día trabaja procesando todos los hechos que se relacionan de alguna forma con nuestra vida. Durante el sueño, el cerebro queda liberado del trajín del día y de la avalancha de estímulos provenientes del mundo exterior, de modo que su actividad se centra en procesar los contenidos mentales.

Los estudios indican que las personas sueñan durante casi toda la noche aunque no tengan conciencia de haber soñado. En los sueños el cerebro procesa los contenidos mentales, relaciona ideas, crea nuevas conexiones, drena las tensiones, recupera la energía gastada y crea las condiciones para funcionar de forma más eficaz. De aquí la importancia que tiene el dormir lo necesario.

Muchas personas tienen dificultad para dormir o tienen pesadillas constantes, debido a problemas serios que el cerebro no logra resolver. La falta de sueño o las pesadillas no son el problema en sí, son sólo la consecuencia de un problema que pide solución.

El dormir bien es el comportamiento normal de una persona que funciona bien; así como el dormir mal es el comportamiento de una persona que tiene problemas serios por resolver.

Los somníferos son pañitos calientes. Es necesario un tratamiento que vaya a la raíz del problema.

El cerebro no es un robot, es humano, por tanto, es sensible a todo lo que ocurre dentro y fuera de él. Los estímulos pueden activarlo o bloquearlo; por lo cual, es conveniente aprender a seleccionar ideas, personas, sentimientos y decisiones. El cerebro aprende, se adapta y puede reprogramarse.

 

El cerebro dialoga constantemente con el mundo exterior a través de los sentidos.

Cómo aprovechar al máximo el cerebro

"Somos dueños de lo que conocemos y esclavos de lo que ignoramos" De aquí la importancia de conocer el funcionamiento del cerebro y las leyes que lo rigen con el fin de aprovechar al máximo sus poderes.

Tabién es necesario conocer las técnicas y métodos más avanzados de aprendizaje para lograr eficacia en lo que hacemos.

El mayor activador del cerebro es el lenguaje, debido a que el código utilizado por el cerebro es verbal. La capacidad procesadora del cerebro depende de la cantidad y de la calidad del lenguaje; por lo cual es fundamental cultivar el hábito de la lectura, incrementar el vocabulario y enriquecernos constantemente con nuevos conocimientos. No se trata de saber todo, se trata de saber lo importante de lo importante.

El cerebro es humano, por tanto, es sensible a todo lo que ocurre dentro y fuera de él. Los estímulos pueden activarlo o bloquearlo; por lo cual es importante funcionar bien a nivel económico, físico, afectivo, familiar, social, moral y espiritual, pues, cuando existen problemas importantes en cualquiera de estos aspectos, el cerebro, por un mecanismo de supervivencia, se ve obligado a trabajar en la solución de estos problemas. Al trabajar en distintos frentes, la energía mental se dispersa y carece de poder para lograr objetivos importantes. Por lo cual, la primera condición para sacarle provecho al cerebro es funcionar bien como persona.

La motivación y el estado de ánimo positivo son fundamentales para tener éxito en cualquier actividad. La capacidad del cerebro es inmensa, el límite lo pone cada persona. Por esta razón, cada persona llega hasta donde decide llegar. Los grandes triunfadores no son personas más inteligentes que los demás. Son personas que un día tomaron la decisión inquebrantable de triunfar y fueron consecuentes con su decisión. Después, el interés, la fe y la perseverancia hicieron lo demás.

El interés activa el cerebro y unifica la energía. Cuando existe un proyecto importante y atractivo, el cerebro dirige la energía de todas las neuronas en la dirección correcta para convertir el proyecto en realidad. El cerebro es capaz de crear nuevas neuronas y fortalecer las conexiones cuando es necesario para lograr un objetivo importante. De aquí la importancia de tener ideales, convicciones y metas concretas.

Para que el cerebro produzca ideas y soluciones es necesario activarlo constantemente. Los mejores activadores son la lectura, la reflexión y la creatividad. Estudios recientes indican que las personas que se nutren con lecturas valiosas tienden a convertirse en líderes, debido a que la lectura estimula la inteligencia, la creatividad y la motivación.

En una sociedad en donde la información es abrumadora y a la vez confusa, es fundamental filtrar y seleccionar lo que sirve para lograr nuestros objetivos. La excesiva información puede ser un obstáculo que reduzca la creatividad y debilite la fluidez de la mente. Por tanto, es fundamental la capacidad de síntesis. Esta capacidad se desarrolla de forma progresiva, a medida que las personas aprenden a establecer prioridades. Es importante centrarse en objetivos valiosos y no perder el tiempo en objetivos basura, pues, la vida es corta, la energía limitada y muchos los sueños por realizar.

En los Cursos de Lectura Veloz enseñamos a reducir cada párrafo a una o dos palabras. Al principio resulta difícil, pero pronto se convierte en un hábito natural. A partir de aquí la vida de las personas cambia en todos los aspectos, debido a que saben percibir directamente lo esencial de las cosas. Lo esencial tiene valor y significado, lo cual proporciona seguridad e impulsa a tomar decisiones correctas y valientes, no sólo en relación con el aprendizaje sino también en relación con la vida, las amistades, el trabajo, etc.

La capacidad y la eficacia del cerebro depende:

1. De la cantidad y valor de los conocimientos que posee la persona. Dichos conocimientos se encuentran fijados en palabras, por lo cual, el nivel de vocabulario de una persona es igual al nivel de conocimientos que tiene.

2. De la forma en que están organizados los conocimientos. Es importante tener los conocimientos asociados y organizados en estructuras claras y simples. Cuando esto no ocurre, las personas carecen de ideas, son lentas y poco eficaces. Por lo cual, más importante que tener muchos conocimientos es tener conocimientos importantes bien organizados.

3. De la forma en que están definidas las ideas. Las ideas bien definidas pueden ser recordadas de forma clara e instantánea. Cuando las personas tienen las ideas bien definidas son fluidas en sus ideas, en su lenguaje y en sus acciones. Lo cual no significa prisa, sino eficacia.

Cuando las personas tienen que pensar mucho se debe a que no tienen ideas o las tienen mal definidas.

De todos modos, cuando se trata de resolver situaciones complejas, el cerebro necesita tiempo para procesar información y producir las respuestas.

3. De la dedicación y perseverancia. La Ley de Entropía todo tiende a deteriorarse. La ley del Olvido es implacable y elimina de la mente lo que no funciona bien, lo que carece de organiza ción y consistencia; por lo cual, es necesario reorganizar y fortalecer las ideas, valores y objetivos que consideramos importantes. Cuantas más veces traemos a la memoria las ideas, proyectos... más poder adquieren y más se imponen sobre los demás contendos del cerebro.

El cerebro no da saltos al vacío. Es importante establecer objetivos por etapas.

También es importante integrar todos los objetivos de la vida en un sólo proyecto, en un Proyecto de Vida, con el fin de que todo lo que hacemos nos ayude a crecer en todos los aspectos a la vez.

En definitiva, tú eres tu cerebro y tu cerebro eres tú. Cuídalo, aliméntalo y protégelo.