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Editorial 395

 


Para qué eres bueno

 

Todo existe por una razón. La naturaleza es sabia y pródiga. Derrama bienes a manos llenas. Cada ser humano está dotado de numerosas capacidades que le facultan para lograr grandes objetivos. Todos conocemos casos de personas discapacitadas que son capaces de realizar cosas impresionantes. Por tanto todos somos buenos para algo.


Es importante conocer nuestras fortalezas y debilidades. El conocimiento de nuestras fortalezas nos ayudará a invertir tiempo y esfuerzos en la dirección correcta y el conocimiento de nuestras debilidades nos ayudará a prever y evitar posibles errores.


Cada ser humano llega a este mundo con una vocación , con una misión. La palabra vocación deriva del verbo latino vocare (llamar) Los seres humanos hemos sido llamados a la existencia, a la fiesta de la vida. La vida debería ser una fiesta de alegría y regocijo. La vida es un valor maravilloso y una oportunidad para aprender, para crecer y para ser felices. El problema existencial no es la vida sino nuestra incapacidad para programarnos correctamente.

La palabra misión deriva del verbo latino mitere (enviar) Los seres humanos hemos sido llamados a la vida para cumplir una misión. Según el filósofo Platón, los seres humanos somos demiurgos (pequeños dioses) que tenemos la misión de convertir las ideas e ilusiones en realidad; por lo cual, nuestra misión es colaborar en la construcción del mundo.


La misión de cada persona es importante. Los seres humanos valoramos más unas misiones que otras. Por ejemplo, valoramos más la labor del médico que la del barrendero, sin embargo, para la naturaleza, ambos trabajos son igualmente importantes. ¿De qué serviría la labor de los médicos si no hubiera barrenderos que evitan que se acumule la basura?


En la naturaleza no existe nada por azar. Todo existe por una razón y ocurre por una razón. Esta razón escapa a la comprensión de nuestro diminuto cerebro.

Muchos se preguntan:
¿Qué misión cumplen las personas totalmente discapacitadas?
Las personas discapacitadas cumplen una misión muy importante: Mostrarnos la fragilidad de la vida, despertar sentimientos de compasión, mantener viva la sensibilidad humana y estimar el valor de la salud.


¿Qué misión cumplen los corruptos?
La tendencia natural del ser humano es el libertinaje y la corrupción. Lo ideal sería que la educación creara conciencia y no hubiera corruptos en el mundo. Esto sólo será posible cuando la humanidad alcance niveles superiores de evolución. Mientras llega ese día, la corrupción será parte de la dinámica de la sociedad.


En la naturaleza no hay compasión. A la naturaleza no le interesan las semillas que mueren sino las que sobreviven, porque ellas son las que aseguran el futuro de la especie. A nivel de los animales le interesan los más fuertes, porque son los que garantizan la supervivencia de las especies, por este motivo, las leyes naturales favorecen a los más fuertes.


A nivel humano, todas las células llevan impresa la orden de vivir, de crecer y de multiplicarse. A nivel mental, existen muchas fuerzas que impulsan al conocimiento, a la superación, a la sociabilidad y a la liberad. Estas tendencias tienen como objetivo garantizar la evolución; sin embargo, somos víctimas de muchas formas de represión que nos condicionan y nos impiden desarrollar nuestro potencial.


Los seres humanos somos buenos para muchas cosas pero necesitamos programarnos correctamente. Todas nuestras conductas importantes dependen de hábitos adquiridos. De aquí la importancia de desarrollar desde niños numerosas habilidades, debido a que en la infancia y la juventud resulta más fácil el aprendizaje.


La sociedad nos programa de acuerdo a sus intereses. Nos programa para que aceptemos de forma sumisa un papel en la sociedad, para que seamos una pieza que encaje en el gran robot productivo.


A la sociedad no le interesan nuestros sentimientos ni nuestra felicidad, sólo le interesa que seamos productivos y que no le causemos problemas. Es la forma de mantener el orden establecido.


Todos sabemos que la educación tiene carencias graves que luego se pagan muy caro, pero nadie hace nada por mejorar el sistema educativo.


Las revueltas sociales son consecuencia de la insatisfacción de la gente. La angustia y muchas formas de enfermedades que aquejan a la sociedad son producto de la frustración. Las personas sienten que nacieron para algo grande pero sus aspiraciones se ven frustradas por mil razones que todos sabemos.


¿Sabes para qué eres bueno?
Descubrir la propia vocación es encontrar el camino que conduce al éxito. Muchas personas, por diversas razones, están atrapadas en trabajos y responsabilidades que no se corresponden con su vocación natural. Es como caminar con calzado que no se acomoda al pie, como es lógico, el caminar resultará desagradable y causará ampollas.


La primera condición para triunfar en algo es poseer las capacidades adecuadas.


La mayoría de las personas no conocen su vocación ni su misión. La mayoría de los universitarios se deciden por una profesión, no tanto por razones de satisfacción personal cuanto por razones sociales y económicas, luego viene la desilusión y van cambiando de una profesión a otra.


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    Lic. David Angulo de Haro

 

 

 

 

 

 

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