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Editorial 343

 


Abre los ojos

 

No se trata de abrir los ojos de la cara sino los ojos de la mente. Los ojos físicos son sólo la ventana a través de la cual entran las imágenes del mundo exterior al cerebro. El cerebro las procesa, saca las conclusiones según el caso y actúa en consecuencia. "Nada hay en el cerebro que no haya entrado antes por los sentidos" Aristóteles.


Cada persona percibe las cosas de acuerdo al nivel de desarrollo mental que ha alcanzado (de acuerdo a sus conocimientos y experiencias)


Aprendemos por analogía; es decir, por la relación que tienen las cosas que percibimos con la información que tenemos grabada en la mente. En consecuencia, sólo podemos comprender aquello que se relaciona con lo que sabemos. Si despertáramos en un mundo nuevo, en donde nada tuviera relación con el mundo que conocemos, tendríamos que comenzar de cero, como lo hacen los recién nacidos.

Lo que aprendemos hoy se apoya en lo que aprendimos ayer. Cada ladrillo de una construcción se apoya en el ladrillo anterior. El éxito se da porque se han creado antes las condiciones que lo soportan; así como el fracaso es la culminación de un proceso de errores.
Lo dicho nos invita a reflexionar y hacer bien las cosas, porque, tanto el éxito como el fracaso, lo construye progresivamente cada persona. En definitiva, tú dependes de la calidad de lo que haces.

Podemos ver muchas cosas buenas y malas, pero, al final, cada uno aprende de sí mismo, aprende de la forma en que hace las cosas. Hay personas que no aprenden nunca, porque siempre hacen las cosas de la misma forma. Necesitamos renovarnos constantemente.


Abre los ojos significa: Encuentra las claves del éxito, del progreso, de la libertad y de la felicidad verdadera, porque sólo cuando las hayas internalizado en tu mente podrás percibirlas en la realidad de cada día y aprovechar todas las oportunidades que te ofrece la vida para convertir tus sueños en realidad.


La falta de una visión superior hace que busquemos en el suelo lo que está en las alturas. La falta de una visión interior hace que busquemos fuera lo que sólo podemos encontrar en nuestro interior.
Es importante aprender de nuestros errores para no seguir repitiéndolos. La mayoría de las personas repiten todos los días las mismas conductas como si fueran calcadas y cometen los mismos errores, a sabiendas de las consecuencias que generan.


Creemos que las personas reinciden en sus errores porque quieren, pero no es así; nadie quiere cometer errores, pero las personas son esclavas de sus programaciones mentales, de sus hábitos, los cuales mandan y deciden. De aquí la importancia de abrir los ojos, de informarse para encontrar el verdadero camino. El conocimiento es poder y es libertad.


El cerebro es como un telescopio. Hay telescopios que tienen un alcance muy limitado y hay telescopios poderosos, como el que ha instalado Europa en (Chile) el cual tiene un diámetro de 42 metros. Este "ojo del universo" podrá escudriñar hasta los confines de las galaxias.


El cerebro de las personas es como un telescopio. Hay personas que no ven más allá de sus narices y desaprovechan todas las oportunidades que les brinda la vida, y hay personas que captan las cosas al vuelo y ven oportunidades en todo.


Abre los ojos de tu mente. Aprende a ver tantas oportunidades de aprender, de progresar y de ser feliz que te ofrece la vida. Programa tu mente. Aprende a ser sabio ahora, pues de nada te sirve ser sabio cuando seas viejo.


Si las personas tuviéramos conciencia clara de las oportunidades que hemos desaprovechado y de la cantidad de cosas tontas o inútiles por las cuales hemos luchado y en las cuales hemos malgastado los años que nos ha obsequiado la vida, tal vez nos volveríamos locos de dolor, de rabia y de frustración; pero esto no va a ocurrir porque nuestra ceguera mental es tan grande que no nos permite ver hasta dónde podríamos haber llegado si hubiéramos hecho bien las cosas.


Aún estás a tiempo. Abre los ojos y no busques fuera lo que sólo puedes encontrar dentro de ti.


No seas ingenuo, no creas que las cosas van a cambiar o que la suerte te va a favorecer. Las cosas sólo cambiarán para ti, cuando cambies tú y la suerte sólo vendrá a ti, cuando la crees dentro de ti.


No dejes que las circunstancias ni las personas programen tu vida; crea las circunstancias para que trabajen para ti.


En realidad, nadie puede ayudarnos mucho, debido a que el éxito y la felicidad son una conquista personal.


Sin esfuerzo, sin disciplina y sin perseverancia jamás podrás convertir tus sueños en realidad.

El éxito tiene un precio alto, pero tiene sus beneficios, mientras que el fracaso tiene un precio muy alto y ningún beneficio.

 


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    Lic. David Angulo de Haro

 

 

 

 

 

 

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