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Editorial 297

 


Inteligencia vs sabiduría

 

La palabra inteligencia proviene del latín, inteligere , término compuesto de (inter =entre y legere =leer) Significa "escoger" por lo que, etimológicamente, inteligente es la persona que sabe leer, abstraer o escoger.


Resumiendo los distintos conceptos que existen sobre inteligencia podemos decir que es la capacidad de comprender, aprender, resolver problemas y situaciones, adaptarse, relacionarse, planificar, crear, etc.


Para el filósofo Platón, la inteligencia racional es una sabiduría inferior, en cuanto se dedica al conocimiento de las cosas materiales, mientras que la sabiduría superior se dedica al conocimiento de la esencia de las cosas; es decir, de lo que trasciende a la realidad material.


El filósofo Aristóteles, consideró la sabiduría como la ciencia de los primeros principios (busca el origen primero de las cosas, la Causa Primera de la que procede todo) y el fin último de las cosas ; es decir, la Causa Final hacia la cual tiende todo. Para Aristóteles la sabiduría es Metafísica, es decir, lo que está más allá del mundo físico.


La sabiduría era considerada como una actitud de moderación y prudencia en todos los aspectos y como madurez y experiencia.


El sabio era considerado como una persona madura, capaz de controlar vicios y pasiones y de realizar juicios reflexivos acertados sobre las cosas importantes de la vida.


Para los antiguos, sabiduría y virtud eran sinónimas. No se concebía un hombre sabio que no fuera virtuoso ni un hombre virtuoso que no fuera sabio.


El ideal del sabio era aprender a aceptar estoicamente, con serenidad, los designios del destino, la voluntad de los dioses.


En definitiva, la sabiduría era un conocimiento superior al cual estaban subordinados los demás conocimientos.


El ser humano es un producto de la evolución. Al principio era un simple animal salvaje que se regía por los instintos como cualquier animal actual, pero un día comenzó a evolucionar y fue desarrollando la inteligencia y la conciencia. La inteligencia le permite conocer la naturaleza y funcionamiento de las cosas y la conciencia le permite conocer la verdad y el bien y juzgar el valor moral de los actos humanos.


La inteligencia se desarrolla a través del aprendizaje de conocimientos y la sabiduría se desarrolla a través del aprendizaje de principios, valores, criterios y conductas. La inteligencia está más relacionada con el conocimiento del mundo material; mientras que la sabiduría se relaciona más con el conocimiento del ser humano y del sentido de la vida y con el conocimiento de la verdad y de los valores superiores.


La sabiduría se asocia con la edad avanzada. Se supone que las experiencias de la vida van dejando enseñanzas sobre el valor real de las cosas. Sin embargo, la edad no es garantía de sabiduría a menos que vaya acompañada de una experiencia profunda de las cosas. (Hay demasiados adultos que distan mucho de ser sabios) Así como la juventud tampoco es un impedimento para ser sabio. (Existen muchos jóvenes maduros, evolucionados y sabios)


La sabiduría no es tanto cuestión de edad sino de asimilación de experiencia y de valores.

En la actualidad el avance científico es impresionante. El progreso científico es bueno en sí, pero puede entrañar graves peligros si no se maneja con criterio. Todo en exceso genera problemas. Lo ideal es el equilibrio.


Por ejemplo, el lenguaje científico y técnico está ocupando cada día más espacio del cerebro, desplazando al lenguaje humanístico.


¿Cuáles son las consecuencias de este fenómeno?

El lenguaje científico tiene un significado restringido a la ciencia. La ciencia es importante porque nos permite conocer el mundo y utilizar las cosas para progresar y vivir mejor, pero sólo hace referencia al mundo material; carece de contenidos morales, sociales, afectivos, espirituales, etc. mientras que el lenguaje humanístico hace referencia a la vida humana, a los sentimientos, a los valores, a las conductas, a los derechos y a los deberes; por lo cual, el desarrollo exagerado del lenguaje científico en detrimento del lenguaje humanístico tiende a robotizar a las personas; es decir, a reducir la conciencia, la sensibilidad humana, los sentimientos, los valores, la convivencia, etc.


La esencia de la evolución es el desarrollo de la inteligencia y de la conciencia. Ambas cosas deberían ser objetivos prioritarios de todos los seres humanos; sin embargo, la dinámica de la vida obliga a las personas a especializarse en profesiones y actividades técnicas, científicas y comerciales, descuidando su desarrollo humano, porque, al parecer, no cotiza en el mercado de valores.


Lo expresado no quiere decir que las personas dedicadas a la ciencia carezcan de sabiduría, de valores y de sensibilidad humana. En general, todas las personas han recibido una educación de valores y se guían por ellos. Sólo queremos señalar que existe un incremento acelerado de lo científico y una reducción de lo humanístico, lo cual ya está generando graves consecuencias.
El problema está en que el conocimiento sin conciencia es una combinación explosiva. "Una persona sin moral es un azote para la sociedad" y, si esta persona tiene muchos conocimientos es aún más peligrosa. Los tontos nunca han causado mal al mundo. El mal lo han causado personas inteligentes o poderosas, carentes de moral y de sensibilidad humana.


La inteligencia sin sabiduría, o lo que es lo mismo, la ciencia sin moral, pueden llevar a la humanidad al desastre total.

La ciencia tiene poder sobre la energía atómica, sobre el código genético, sobre el cerebro humano.
Los banqueros tienen poder sobre la economía y las grandes empresas tienen poder sobre la producción y el comercio.


Si estos poderes no son manejados con criterios de sabiduría; es decir, con conciencia, con valores y con sensibilidad humana, podemos regresar a la ley de la selva.


Los daños causados al ecosistema, la explotación irracional de los bosques y tantos otros problemas graves creados por el hombre son el resultado de la inteligencia sin sin sabiduría, del progreso sin ética.

Muchos opinan que es cuestión de establecer normas éticas que controlen a todos los poderes. Pero ¿Quién va a establecer las normas cuando la mayor parte de las personas carezcan de ética o cuando los más poderosos tengan el control del mundo?


Cuando las personas no tienen controles internos no existe fuerza en el mundo que pueda controlarlas, y, cuando ocurre esto, las personas no tienen lógica ni conciencia de las cosas. Sus impulsos irracionales guían su vida y sus decisiones.


La sabiduría es fundamental para actuar con criterio, con prudencia, con sentido común, con honestidad.


Sólo las personas sabias conocen el camino del bien y tienen la fortaleza para seguirlo hasta el final.


Sólo las personas sabias se respetan a sí mismas y respetan a los demás.


Sólo las personas sabias tienen verdadera autoestima y sentido de la dignidad.


Las personas sabias no son perfectas, pero se esfuerzan cada día por ser la mejor persona que pueden llegar a ser y por dar al mundo lo mejor de sí.


La humanidad ha tardado millones de años para desarrollar la cultura que hoy disfrutamos (ideas, conciencia, valores, convivencia...) Lo ha logrado a base de lucha, esfuerzos, fracasos y sacrificio, y, sería muy triste que todos estos logros se perdieran por dejar el rumbo de la historia en manos de personas indeseables; por lo cual, es deber de las personas sabias desarrollar la sabiduría en sí y en los demás. La sabiduría es la única garante del desarrollo, de la libertad y de la felicidad, no así la simple inteligencia ni la ciencia.


Es indudable que la humanidad crece en inteligencia y las personas tienen más información, pero sirve de poco si no se traduce en más conciencia y en mejor calidad de vida.
La ignorancia, la pobreza, las guerras y la corrupción, no se deben tanto a la falta de inteligencia, cuanto a la falta de sabiduría.


La inteligencia puede convivir y hacer amistad con el egoísmo, la avaricia, la corrupción y la explotación; así vemos gente muy capacitada pero con poca moral, implicada en hechos ilícitos; mientras que, la sabiduría sólo hace amistad con la verdad y con el bien.


Hasta aquí hemos hablado de la diferencia que existe entre inteligencia y sabiduría. A continuación te ofrecemos unas frases para que puedas sacar conclusiones para tu vida y comprendas el por qué del título inteligencia vs sabiduría


Frases para llegar a ser sabio

Todo sabio es inteligente pero no todos los inteligentes son sabios.


Si sabes mucho eres inteligente, si sabes vivir eres sabio.


Si conoces los secretos de la naturaleza eres inteligente, si conoces el camino de la libertad eres sabio.


Los padres y educadores que enseñan el conocimiento de las cosas son inteligentes, los padres y educadores que enseñan a vivir son sabios.


Las personas que triunfan a nivel profesional son inteligentes, las personas que triunfan a nivel personal son sabias.


Si resuelves los problemas que te creas eres inteligente, si evitas crearte problemas eres sabio.


Si das un pez puedes ser inteligente, si enseñas a pescar eres sabio.


Si lees mucho puedes ser inteligente, si aprendes de lo que lees eres sabio.


Si administras bien tu dinero eres inteligente, si administras bien el tiempo y tus capacidades eres sabio.


Si creas respuestas para el progreso eres inteligente, si creas respuestas para la felicidad eres sabio.


Si sabes controlar a los demás eres inteligente, si sabes controlarte a ti mismo eres sabio.


Si tienes amigos exitosos eres inteligente, si tienes amigos virtuosos eres sabio.


Si te apoyas en los demás eres inteligente, si te apoyas en ti mismo eres sabio.


Si adquieres cultura eres inteligente, si creas cultura eres sabio.


Si te esfuerzas por progresar eres inteligente, si te esfuerzas por desarrollarte eres sabio.


Si pides perdón eres inteligente, si no necesitas pedir perdón eres sabio.


Si buscas conocimiento eres inteligente, si buscas la verdad eres sabio.


Si te haces respetar eres inteligente, si te haces querer eres sabio.


Si planificas tu trabajo eres inteligente, si planificas tu vida eres sabio.


Si sabes protegerte de tus enemigos eres inteligente, si no tienes enemigos eres sabio.


Si acumulas conocimientos eres inteligente, si acumulas experiencia eres sabio.


Si superas las crisis eres inteligente, si evitas las crisis eres sabio.


Si compartes tus conocimientos eres inteligente, si compartes tu verdad, tu experiencia y tu afecto eres sabio.


Si dedicas todos los días tiempo para capacitarte eres inteligente, si dedicas tiempo para crecer eres sabio.


Si sabes pensar eres inteligente, si sabes meditar y contemplar eres sabio.


Si sabes hablar eres inteligente, si sabes escuchar eres sabio.


Si aprendes de tus éxitos eres inteligente, si aprendes de tus fracasos eres sabio.


Si logras convencer a la gente eres inteligente, si logras que cambie eres sabio.


Si logras despertar la inteligencia de las personas eres inteligente, si logras despertar su conciencia eres sabio.


Si logras que la gente crea en ti eres inteligente, si logras que crea en sí misma eres sabio.


La sabiduría es aquello que te queda cuando todo lo demás se desvanece.


No es que lo que tienes sino lo que eres.


No es tanto lo que sabes cuanto lo que vales.


La sabiduría se construye día a día, a medida que descubres el verdadero sentido de la vida y el verdadero valor de las cosas.


Si eres verdaderamente feliz, entonces eres verdaderamente sabio.

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    Lic. David Angulo de Haro

 

 

 

 

 

 

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