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Editorial 271

 


Drenar la rabia y las frustraciones

 

Cada día la vida resulta más compleja y se rompen con demasiada frecuencia muchos sueños e ilusiones, lo cual genera rabia y frustración. Muchas personas no saben como drenar la rabia ni las frustraciones y, sin darse cuenta, se van envenenando mentalmente y se van cargando de tensión que, tarde o temprano, termina por explotar, en forma de enfermedad por somatización, en forma de depresión, desmotivación, etc.

En la vida no siempre se gana y los que triunfan, fracasaron muchas más veces de lo que te imaginas, antes de llegar a la cima, pero en vez de quejarse o culpar a la gente o a la vida de sus fracasos, siguieron luchando de forma inteligente, buscaron nuevas alternativas, nuevas estrategias y nunca se dieron por vencidos. En vez de compadecerse de sí mismos, de perder tiempo generando rabia o rumiando las frustraciones, actuaron.


Thomas Edison experimentó cientos de veces hasta descubrir la forma de producir la luz. Cualquiera se habría desanimado después de unas cuantos intentos, pero Edison tuvo fe y perseverancia, lo intentó cientos de veces y, ésta fue la diferencia.


El sentir rabia y frustración es natural; lo que no es natural es regodearse en estos sentimientos negativos que no conducen a nada y que debilitan la personalidad. Es fundamental desarrollar fortaleza mental y tomar la vida como una serie de retos permanentes; trabaja sobre un proyecto de vida valioso y ten la seguridad de que, haciendo las cosas lo mejor que puedes hacerlas, estás avanzando hacia el éxito. Lo importante no es ganar o perder batallas; lo importante es ganar la guerra. Cuando se trabaja con esta visión no queda tiempo para la rabia, la ira o las frustraciones, porque detrás de cada acción siempre hay un reto que nos espera.


Existen muchas técnicas para drenar las tensiones. La más importante es una planificación correcta de la vida que permita tener cierto control sobre los aspectos más importantes.


Establece expectativas lógicas y alcanzables y dale tiempo al tiempo.


No esperes mucho de nadie, debido a que el desarrollo y el éxito son producto del esfuerzo personal. Del esfuerzo constante, inteligente y bien .


Desarróllate de forma integral como persona, porque, sólo a partir de un buen desarrollo personal podrás lograr objetivos importantes.


No te dejes atrapar en el ritmo de la sociedad, porque no te quedará tiempo para vivir.


Dedica todos los días unos minutos para reflexionar sobre qué estás haciendo con tu vida.


Dedica unos minutos para hablar con Dios y fortalecer tu fe y tus valores.


Dedica unos minutos para hablar con algún amigo o persona positiva. Esta relación activa tus sentimientos humanos y te proporciona alegría de vivir.


Dedica unos minutos para contemplar la naturaleza. El sentimiento de la naturaleza es fundamental para disfrutar de este paraíso que es la tierra.


Todo esto es necesario para evitar automatizarte y para no perder el contacto con la realidad de la vida.


El descanso adecuado y el ejercicio físico ayudan a drenar. Con frecuencia el fracaso, la rabia y la frustración se deben al cansancio físico y mental.


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    Lic. David Angulo de Haro

 

 

 

 

 

 

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