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Editorial 260

 


No esperes a que el mundo cambie, actúa

 

No esperes a que el mundo cambie. Hay muchas personas que han sido programadas para seguir sumisamente el camino trillado de los mediocres. Son personas sin ambición y sin iniciativa, condenadas a vivir sin pena y sin gloria. Viven a la espera de que las cosas cambien y que pueda tocarles un golpe de suerte y en esa espera pasan la vida.

Alguien ha escrito: "Quiero despertar la aurora" Son palabras de un visionario que en vez de esperar que la vida le dé un espacio, intenta construir un mundo acorde con sus aspiraciones. Un mundo en el cual él sea el protagonista, el demiurgo (pequeño dios) de su propio desarrollo y de su propio destino.

Lo más grande que hay en esta vida es sentirse libre y creativo, pero nadie puede ser libre si no es capaz de abrir su propio camino, sin importar cuáles sean las circunstancias en que le toque vivir.
Lo más importante de la vida, como son: el conocimiento, la experiencia, la libertad, el éxito y la felicidad no lo puede dar nadie, porque son una conquista personal. Todo lo que te rodea, bueno y malo, es una oportunidad que te ofrece la vida para aprender y crecer. En ti está el saber sacarle beneficio a lo bueno y a lo malo.


La gente teme los retos y la responsabilidad. Teme los riesgos. Pero la vida no perdona y nos pedirá cuentas por los errores cometidos pero, sobre todo, por los riesgos no tomados y por las omisiones. Las personas adultas se lamentan más de las decisiones no tomadas a tiempo que de los errores cometidos


No esperes que las cosas cambien ni esperes mucho de nadie. La vida te ha dado lo necesario para triunfar y ser feliz; aprende a administrarlo.


Todos los días desfilan delante de ti infinidad de oportunidades para aprender y para ser feliz; aprende a verlas y no las dejes pasar. La ignorancia, la pobreza y la frustración que sufre la sociedad se deben a oportunidades perdidas


Abre los ojos, planifica y actúa. No te quedes a la orilla del camino esperando que pase el éxito, porque lo último que verás pasar será la carroza fúnebre, transportando tu féretro.


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    Lic. David Angulo de Haro

 

 

 

 

 

 

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