Editoriales

Editorial 227

 


Maestros y profesores

 

Después de los padres son los maestros y profesores quienes programan a los niños y jóvenes para el éxito o para el fracaso.


Hubo épocas en las cuales los maestros eran respectados y admirados. Eran considerados como ejemplo de sabiduría y de moral. Pero las cosas han cambiado y muchos "educadores" se limitan a enseñar matemáticas, lenguaje, ciencias... Son pocos los educadores que estimulan, orientan y crean conciencia.


La educación ha dejado de ser la vocación más bella para convertirse en una profesión más. Las consecuencias son graves. Se ha debilitado la relación maestro - alumno y con ello, se ha debilitado la autoridad de los educadores y su capacidad para influir en los alumnos.


Confucio vivió hacia el año 2500 antes de Cristo, viendo el deterioro moral de su país (China) recorrió pueblos y ciudades predicando un conjunto de doctrinas morales y religiosas. Después de varios años se dio cuenta de que la gente era reacia a su doctrina, por lo cual, decidió dedicarse a predicar a sus familiares y amigos, pero éstos tampoco le entendían, por lo que decidió dedicarse a su propia superación. Es por aquí por donde debió comenzar. Hoy Confucio es el mayor filósofo de China, creador del Confucionismo; doctrina filosófico - religiosa que desde su muerte rige la vida de la sociedad china.

 

El rey, conocedor de la sabiduría y honestidad de Confucio, le nombró Primer Ministro. Un amigo de Confucio le preguntó: ¿Qué es lo primero que vas a hacer? y Confucio le respondió: "Lograr que las palabras recuperen su verdadero significado"


Su amigo no entendió nada, de modo que volvió a preguntarle: ¿Qué significa eso? a lo que Confucio respondió: "Que el rey gobierne con justicia. Que el padre eduque con amor y que el maestro enseñe con sabiduría. Porque si el rey no gobierna con justicia, si el padre no educa con amor y si el maestro no enseña con sabiduría, entonces, el rey no es rey, el padre no es padre y el maestro no es maestro, son unos impostores.

 

Son palabras muy fuertes pero verdaderas. Hoy los educadores del mundo deben reflexionar acerca de su labor, porque no es suficiente con cumplir con el pensum establecido. Los alumnos esperan educadores justos, comprensivos, sabios y honestos que les ayuden a desarrollarse de forma integral, a ser creativos, conscientes y libres; porque estas son las herramientas que necesitan para triunfar en la vida.


Los alumnos nunca olvidan a aquellos educadores que, además de instruirles les enseñan el arte de vivir. Existen muchos educadores impostores que están robando a sus alumnos las posibilidades de triunfar, porque no les dan las herramientas que necesitan para aprender y para desarrollar autoestima, personalidad y liderazgo. "Poco les das a las personas cuando les das de lo que tienes; mucho les das, cuando les das de ti mismo" Kahlil Gibran


Sabemos que la educación está mal en el mundo entero. La educación ha sido, es, y será represiva. Los padres y educadores han sido programados para ser el arma represora utilizada por la sociedad para reprimir y controlar a la juventud. Y los hijos de hoy serán los represores de los hijos del mañana. Y así seguirá la historia hasta que alguien tenga la sabiduría y el poder de educar para la libertad y la creatividad.

Hoy existen teorías y métodos de Super Aprendizaje que podrían convertir el estudio en una actividad fácil, agradable y rápida, pero no se aplican. Llevo más de 40 años creando y aplicando a miles de personas un método de Super Aprendizaje con resultados increíbles; pero veo con dolor cómo la educación se deteriora y cómo los educadores van perdiendo autoridad y poder para educar.


La pérdida de valores religiosos, morales y familiares van acompañados de la pérdida de respeto a la autoridad, y, sin autoridad por parte de los educadores y sin respeto por parte de los alumnos, la educación se convertirá en un simple trámite académico que dejará poca huella en los alumnos.


Si piensas dedicarte a la educación, debes capacitarte de forma excelente, fortalecer tu autoestima y creer que la vocación docente es la más importante de la sociedad. No importa que a nivel social sea poco reconocida.


Si funcionas a buen nivel, si te interesas por tus alumnos como personas y si desarrollas buen criterio pedagógico, tus alumnos te respetarán, te escucharán y jamás olvidarán tus orientaciones.


La sociedad ha depositado en los educadores la esperanza de que formen a los hijos del mañana y, de no ser así, no tiene sentido que se dediquen a la educación. El valor de un educador se mide por la capacidad que tiene para desarrollar la inteligencia, la conciencia y la personalidad de sus alumnos.


No te conviertas en ladrón de sueños. Muchos educadores roban a sus alumnos los sueños, la ilusión y la esperanza. Se trata de un crimen que debería estar tipificado en la ley.


Los alumnos están hartos de una educación monótona, lenta y poco creativa que se limita a instruir. Los alumnos están saturados de críticas y de consejos inútiles.


Los alumnos esperan una educación más interactiva y, en vista de que el sistema educativo no va a cambiar, cada educador debe encontrar la forma de convertir el estudio en una actividad fácil, agradable, fluida y eficaz, pero, sobre todo debe ser un ejemplo de persona que estimule lo mejor de sus alumnos. Dar ejemplo no es la principal manera de influir sobre los demás; es la única manera. Albert Einstein


En el Proyecto Alfa puedes encontrar numerosas ideas y ejercicios que te pueden ayudar a construir tu propio método para enseñar de forma fácil, agradable y eficaz


La Organización Gallup ha realizado un estudio entre altos gerentes de Estados Unidos, Inglaterra, Canadá, Francia, Japón, China, etc. esta investigación nos va a ayudar a dar un enfoque eficaz a la educación de los niños y al desarrollo de uno mismo.


Conclusiones

1. Las corporaciones del mundo gastan demasiado tiempo, dinero y energía en subsanar las debilidades laborales, en vez de desarrollar las fortalezas y lo que es aún más importante, los talentos.


2. Las empresas más exitosas son las que han decidido reforzar las fortalezas y manejar las decisiones laborales según la habilidad de cada cual, sin intentar cambiar a los empleados por medio de cursos, destinados a mejorar los aspectos en los que fallan.

Trabajando las debilidades (corrigiendo fallas) nunca llegarás a ser excelente. El estatus de excelencia sólo lo lograrás en aquellas áreas para las cuales tienes talento, que son, precisamente, los que debes reforzar.


3. A la pregunta ¿Qué crees que te ayudaría a mejorar. El conocer tus fortalezas o el conocer tus debilidades? En los países más desarrollados invertían el tiempo en incrementar las fortalezas; mientras que, en los países menos desarrollados en subsanar fallas.
Como puedes observar, se trata de dos visiones muy distintas; la primera conduce al éxito y la segunda conduce al fracaso.


4. La ignorancia, la pobreza y la corrupción que aquejan a la sociedad se deben a la poca eficacia de la educación familiar y de la educación escolar. Por tanto, no es con leyes como se gobierna el mundo, sino con principios y valores, que hacen que las leyes no sean necesarias.
Test - Eres un buen educador


Test

1. ¿Conservas el dominio de ti en todas las circunstancias?. Sí
2. ¿Posees criterios amplios? Sí
3.¿Expresas paz, seguridad, éxito y felicidad? Sí
4. ¿Ere positivo y optimista? Sí
5. ¿Confías en la capacidad de tus alumnos? Sí
6. ¿Estimulas y orientas? Sí
7. ¿Conviertes el estudio en una actividad fácil, agradable y dinámica?. Sí
8. ¿Eres flexible y te adaptas a las circunstancias ? Sí
9. ¿Escuchas a tus alumnos y tomas en cuenta sus opiniones? Sí
10. ¿Te consideras más instructor que educador? No
11. ¿Promueves la creatividad? Sí
12. ¿Disfrutas de tu trabajo? Sí
13. ¿Sientes que tus alumnos te respetan de verdad? Sí
14. ¿Pones interés en enseñar a tus alumnos principios y valores? Sí
15.¿ Das más importancia al esfuerzo que a los resultados? Sí
16. ¿Crees que la justicia debe privar sobre la comprensión? No
17. ¿Te resulta fácil mantener la disciplina? Sí
18. ¿Estimulas a cada alumno de forma personal? Sí
19. ¿Eres perfeccionista? No
20. ¿Te consideras un educador excelente? Sí

 

Evaluación



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    Lic. David Angulo de Haro

 

 

 

 

 

 

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