1148 temas de desarrollo personal
La finalidad de estos temas es adquirir informaci¨®n clara y seria sobre aspectos importantes de la vida.
Los criterios claros incrementan la autoestima, la creatividad y la capacidad para tomar decisiones eficaces.
Editorial 223
Diálogo vs discusión
La vida es lucha y competencia dentro de ciertas reglas de juego. Algunas de estas reglas son impuestas por la naturaleza y se observan también entre los animales; otras son impuestas por la sociedad. La finalidad de las normas es regular las relaciones humanas y crear condiciones de paz y armonÃa que favorezcan el entendimiento, el progreso y la paz.
Para que las relaciones humanas funcionen bien deben basarse en la verdad, en la justicia y en la lógica. Sólo asà será posible el diálogo y el entendimiento. Pero en la actualidad, la mayorÃa de las personas viven a la defensiva, lo cual genera frecuentes discusiones y enfrentamiento.
Cada persona percibe el significado de las palabras y de los hechos de acuerdo a su forma de pensar y de sentir, lo que hace que las mismas palabras y los mismos hechos no signifiquen exactamente lo mismo para todos. Esta es una de las causas por la cual discutimos más de la cuenta. Utilizamos las mismas palabras pero con distinto significado.
La percepción que tenemos del mundo es muy personal. En teorÃa el mundo real es exactamente igual para todos, pero en la práctica es distinto para cada persona, debido a que, cada quién lo percibe y procesa de acuerdo a su modo de ser. En cierta forma, cada persona "crea" su propio mundo a su imagen y semejanza. La frase "Cada cabeza es un mundo" tiene mucho de cierto.
Todos los dÃas "creamos" lo que percibimos a nuestro alrededor y lo que sentimos dentro de nosotros. Lo creamos de acuerdo a nuestro estado de ánimo. Si nuestro estado de ánimo es positivo, percibimos (creamos) los acontecimientos y las personas en positivo; es decir, vemos en positivo, pensamos en positivo, sentimos en positivo, actuamos en positivo y nos va bien. En caso contrario, ya sabemos las consecuencias.
El dÃa que nos levantamos con el pie derecho nos entendemos bien con todo el mundo. Somos capaces de comprender y de perdonar, pero, el dÃa que nos levantamos con el pie izquierdo, salimos dispuestos a pelear con el primero que se cruce en el camino.
¿Qué diferencia existe entre el diálogo y la discusión?
En el diálogo se impone el razonamiento, la verdad y la lógica, mientras que en la discusión mandan los sentimientos personales.
En el ser humano actúan dos fuerzas opuestas. Los Mecanismos de Desarrollo que impulsan al conocimiento, a la creatividad y a la sociabilidad. Y los Mecanismos de Defensa, que son conductas instintivas. Ante cualquier situación que la persona percibe como "peligrosa" tiende a actuar de forma defensiva y agresiva.
Los mecanismos de defensa son anacrónicos, obedecen a viejos mensajes provenientes del "Padre" (Super Yo) y del "Niño" (Subconsciente). Los mecanismos de defensa se deben a programaciones erróneas
recibidas en la infancia, en las cuales predomina la ignorancia y el temor.
Las personas que han recibido una buena educación, tienen buena autoestima y han desarrollado conciencia, criterios y valores. Aceptan las reglas de la sociedad y tienden a resolver las cosas a través del diálogo. Su vida está regida básicamente por la razón, mientras que, las personas que han sido programadas en su infancia con carencias afectivas, con criterios y valores deficientes, no tienen las herramientas necesarias para enfrentar la vida de forma positiva, por lo cual actúan de forma reactiva, utilizando mecanismos de defensa. Estos mecanismos son ciertos estrategias que utiliza la mente para proteger el equilibrio psÃquico y la autoestima. Estas estrategias permiten sobrevivir temporalmente, pero no resuelven el problema real y un problema psicológico no resuelto, tiende a agravarse.
En la sociedad actual, a causa de las mil razones que todos conocemos
(ignorancia, pobreza, injusticia, competencia...) se están incrementando las mentes reactivas, lo que hace que las personas se expresen de forma compulsiva , generando conductas desadaptadas, ineficaces y conflictivas.
Las personas que poseen una mente reactiva tienen poco poder analÃtico y perciben el mundo a su modo, resistiéndose a aceptar cualquier otra interpretación que no coincida con la suya. Reaccionan de forma violenta contra toda crÃtica o idea de cambio. Son muy susceptibles. Sus relaciones humanas son conflictivas; tienden a ser autoritarias, intransigentes y manipuladoras, o bien, son personas inhibidas debido a sentimientos de culpa, lo cual da origen a numerosas enfermedades de tipo somático.
Las personas conflictivas tienen muchos problemas personales y son muy susceptibles por lo cual resulta difÃcil entenderse con ellas, debido a que, en principio, ellas no se entienden consigo mismas y, en segundo lugar, tienen una visión poco objetiva de la realidad.
¿Cómo actuar con las personas conflictivas?
Para entender el comportamiento humano es necesario conocer
la estructura de la mente.
El Padre o Super Yo, contine los principios y normas (+ y -) Fueron grabados en la primera infancia de forma inconsciente y se imponen de forma indiscutible y obligatoria. Necesitan ser controlados por el Adulto
El Adulto o Yo, e s la parte consciente. Se desarrolla a través del conocimiento y de la experiencia. Tiene como función dirigir la vida utilizando y controlando al Padre y al Niño
El Niño o Subconsciente, contine los sentimientos (+ y -) grabados en la primera infancia de forma incosnciente. Se activan de forma automática. Son irracionales y por tanto, necesitan ser controlados por el Adulto
Las personas conflictivas tienen un Adulto débil incapaz de controlar al Padre y al Niño. En consecuencia, el Padre y el Niño toman el control de su vida. Generalmente se alternan en el control. A veces domina el Padre y la persona actúa de forma autoritaria, otras veces manda el Niño y el comportaminto es caprichoso e infantil. Hay personas en las que el control lo ejerce habitualmente el Padre y en otras lo ejerce el Niño. Son personas manÃaco depresivas, conocidas en la actualidad como bipolares, debido a que su vida discurre entre los dos polos (Padre y Niño)
Tanto el Padre como el Niño actúan de forma compulsiva de acuerdo a mensajes grabados en la infancia, los cuales no se corresponden con la realidad actual, por lo cual, no puede haber entendimiento. Al no estar presente el Adulto en la discusión (realidad, razonamiento y lógica) no se puede llegar al entendimiento.
Las personas conflictivas no tienen capacidad para el diálogo ; pero han desarrollado gran habilidad en el manejo de la discusión , por lo cual, debes evitar entrar en su juego.
Las personas conflictivas son autoritarias e intransigentes con los débiles y son aduladoras y manipuladoras con los poderosos.
Lo ideal es mantenerte siempre en el Adulto y utilizar el diálogo. Se trata de actuar desde la verdad, la lógica, la justicia y la ley, y no ceder a ninguna forma de chantaje. Mientras te mantengas en el Adulto tienes todo a tu favor.
Las personas conflictivas están acostumbradas a ganar a través de distintas formas de agresión o manipulación, debido a que logran "sacar de quicio" al otro y hacerlo descender al terreno de la discusión, en el cual son muy hábiles. Sin embargo, cuando se encuentran con personas que saben mantenerse en el Adulto (control de las emociones, razonamiento y lógica) se sienten desarmadas.
Como todos tenemos mucha susceptibilidad y vivimos a la defensiva, necesitamos tomar conciencia todos los dÃas de la necesidad de controlar los sentimientos para no caer en el juego de la discusión. Esta actitud ayuda a desarrollar formas superiores de resolver las cosas a través del diálogo. El diálogo es más poderoso que la discusión. Las personas pueden aceptar o no aceptar las razones expuestas pero si son justas y lógicas, al final se imponen por la fuerza de la verdad.
Es importante capacitarse para tener ideas y criterios claros y una buena autoestima. También es importante aprender a detectar con rapidez a las personas conflictivas para evitar caer en su juego. Las personas conflictivas viven quejándose, criticando o culpando a los demás...
Las discusiones, no resuelven las cosas sino que las complican más, pero muchas personas tienen una necesidad imperiosa de discutir con el fin de drenar su tensión interna causada por angustias, fracasos y frustraciones. Estas personas suelen ser poco conscientes de lo ilógico de su situación, debido a que obedece a problemas subconscientes.
Las discusiones siempre terminan mal
Toda discusión es una lucha de sentimientos en la que ambas partes tratan de imponerse trayendo a colación hechos que poco o nada tienen que ver con el asunto que se discute. En el fondo, el objetivo no es llegar a un acuerdo sino imponerse al otro, para lo cual todo argumento es valido, hasta la descalificación, el insulto, la ofensa y hasta la amenaza. Toda discusión tiene mucho de emotivo y poco de racional por lo cual resulta muy difÃcil llegar a una solución equitativa. En toda discusión se hieren mutuamente los sentimientos, por lo cual ambos salen resentidos, con lo cual, queda el terreno abonado para futuras discusiones. Por esta razón es muy importante evitar las discusiones en el matrimonio, en la familia, en el trabajo, etc.
La discusión es el arma de los que no tienen razón.
Recuerda que, lo que no se resuelve a través del diálogo no se resuelve de ninguna otra forma. Lo importante es que controles las cosas que atañen a tu propia vida y no permitas que nadie interfiera en ellas.
El poder del diálogo
Muchos piensan que la fuerza hay que repelerla con fuerza. Esta idea es válida sólo hasta cierto punto, pues la violencia genera violencia.
La humanidad ha evolucionado y hoy hay formas más poderosas de enfrentar la fuerza bruta. Las protestas pacÃficas parecen ineficaces frente al autoritarismo de muchos dictadores, sin embargo está demostrado que la resistencia pacÃfica es muy eficaz.
El diálogo resulta difÃcil cuando se convive con personas poco evolucionadas; pero es la mejor arma para hacerse respetar y para influir en los demás. El asunto es que, para ganar a través del diálogo hay que tener verdadera autoridad, la cual supone: autoestima, criterios claros y personalidad.
Lo que no se resuelve a través del diálogo
no se resuelve de ninguna otra forma.
    Lic. David Angulo de Haro