1148 temas de desarrollo personal
La finalidad de estos temas es adquirir informaci¨®n clara y seria sobre aspectos importantes de la vida.
Los criterios claros incrementan la autoestima, la creatividad y la capacidad para tomar decisiones eficaces.
Editorial 71
Cómo superar las crÃticas
La crÃtica molesta y hiere el orgullo cuando tenemos la autoestima baja.
La crÃtica es causa de muchos temores, por tanto, es necesario encontrar una estrategia para enfrentarla con eficacia.
La crÃtica es una respuesta instintiva, espontánea y natural; es una respuesta de supervivencia, pero no de desarrollo. Somos crÃticos por naturaleza; asà que nadie puede escapar de la crÃtica. Por tanto, el problema no está en la crÃtica en sÃ, sino en la forma en que reaccionamos ante ella.
La crÃtica puede ser constructiva o negativa. En ambos casos es una advertencia que nos estimula a prepararnos, a ser más prudentes, a reflexionar y a rectificar.
En el fondo, la crÃtica es una señal positiva. Indica que no pasas desapercibido, porque lo que dices o haces es interesante y despierta la curiosidad o la preocupación de las personas
Cómo enfrentar la crÃtica
Lo mejor es evitarla. Muchas personas, para sentirse vivas y poderosas, necesitan ir por la vida agrediendo a los demás. La crÃtica es una forma de agresión y lo peor que pudiéramos hacer es entrar en el juego.
La crÃtica es una realidad habitual y no podemos gastar nuestra energÃa en combatirla, ni en defendernos de ella, pues se convertirÃa en una guerra de desgaste. Debemos aprender a estar por encima de la crÃtica. Esto es posible si la manejamos desde cuatro frentes.
1. Desde los sentimientos.
2. Desde la razón.
3. Desde la experiencia.
4. Desde el lenguaje.
1. Maneja la crÃtica desde los sentimientos
El odio y el resentimiento son autodestructivos. La forma más eficaz de superar estos sentimientos consiste en pensar que, los crÃticos son personas mediocres y frustradas, a quienes duele el éxito de los demás, porque lo sienten como una crÃtica a su mediocridad. Compréndelos y perdónalos, pues ya tienen bastante con su desgracia. Piensa que la crÃtica es un reconocimiento y, como dice el refrán: "Al viento y al loco, déjalos pasar"
Cada persona percibe las cosas desde sus temores y necesidades y sólo ve lo que necesita o quiere ver, para sobrevivir y para afianzar su personalidad.
La crÃtica puede llegar a ser virulenta, cuando tus ideas o tu acción, amenazan la seguridad de los demás; debido a que generan cambios que les obligan a replantearse la validez o funcionalidad de ciertos principios, valores o conductas. Por esta razón, se recomienda no discutir de familia, de polÃtica, de patria, de religión, ni de aquellos temas considerados "delicados"; estos temas son intocables, porque activan automáticamente los mecanismos instintivos de defensa.
La sociedad se opone radicalmente a todo lo que induce al cambio, a la toma de conciencia y a la libertad, pues las personas libres son "peligrosas", porque pueden cambiar el orden establecido, desenmascarar a la gente y obligarla a ser más auténtica y responsable. Por esta razón, la sociedad ha eliminado a quienes han tratado de liberarla (Sócrates, Cristo, Gandhi, Martin Luter King y toda una pléyade de héroes y de mártires a quienes debemos la mayor parte de nuestras libertades)
Recuerda que todos somos la sociedad. Todos nos oponemos de forma consciente o inconsciente al progreso de los demás, porque somos envidiosos, crÃticos y represivos por naturaleza. Para comprobarlo, escucha el lenguaje de las personas, pero presta mucha atención, porque la mayorÃa de las crÃticas son sutiles y subliminales, de esas que "tiran la piedra y esconden la mano". Estas crÃticas son las más dañinas.
Si eres una persona con proyectos importantes debes fortalecerte, para abrir tú propio camino, consciente de que la crÃtica te seguirá a donde vayas; pero ten la seguridad de que en el fondo, todos te respetarán y te admirarán, porque tienes la iniciativa y el coraje que a ellos les falta.
2. La crÃtica nos ayuda a reflexionar
Como señalamos anteriormente, cada persona nos percibe desde su situación, lo que nos ofrece un abanico de matices y la posibilidad de conocernos desde distintas perspectivas; por tanto, no hay que dar crédito a lo que dice la gente, pero es bueno escuchar y someter a análisis las opiniones de los demás.
Es conveniente analizar la crÃtica desde el punto de vista personal, desde el punto de vista del crÃtico y como observador imparcial.
Si tratas de justificar tus errores, todo el mundo se sentirá con derecho a criticarte, pero si los aceptas con humildad, todos se sentirán inclinados a comprenderte y a disculparte.
Si la crÃtica es ofensiva y atenta contra tu reputación, debes salirle al paso y aclarar la situación, siempre con altura y dignidad.
Hay casos en que la crÃtica se convierte en rumor que va y viene. Los rumores no pueden combatirse, porque son como fantasmas, están en todas partes, pero nadie pude ubicarlos. El único remedio contra los rumores es el éxito.
3. Sé práctico.
Acepta la crÃtica como parte natural e inevitable de la vida.
Reconoce el derecho de los demás a criticarte y recuerda que al hacerlo se están defendiendo de sus temores y frustraciones.
Con frecuencia la intención de la crÃtica es herir, asà que, no te des por aludido y verás como pierden el interés y dejan de criticarte.
Actúa sin esperar que los demás te comprendan. Confórmate con saber que estás en el camino del éxito.
Haz las cosas por convicción. No te preocupes demasiado por complacer a los demás.
Muchas personas viven en actitud expectante y a la defensiva, lo cual produce estrés y supone un gasto enorme de tiempo y de energÃa que necesitamos para nuestro desarrollo. Esta actitud defensiva genera temor, desconfianza y una visión negativa de la vida, de la gente y de las cosas, que hace ver enemigos en todas partes.
Hay que pensar que la gente es fundamentalmente buena, pero tiene muchas carencias de conocimiento, de justicia y de amor y por eso es envidiosa y crÃtica. Aprende a ver lo bueno de la gente y de la vida, porque sólo con ello podrás construir el éxito.
Hasta el momento nos hemos visto como vÃctimas, pero formamos parte de la sociedad y por tanto, también somos victimarios; asà que necesitamos mirarnos en el espejo de los crÃticos.
4. Cultiva un lenguaje asertivo
Habla bien de la gente. Que tu boca se abra para decir la verdad y para estimular. Si tienes algo bueno que decir, habla, si no, calla. Recuerda que por la boca muere el pez y que eres dueño de lo que callas y esclavo de lo que dices.
"Cuando señalas con el dedo recuerda que los otros tres dedos te señalan a ti"
La gente desea agradar y ser aceptada. Este deseo nos hace vulnerables, pues dependemos del reconocimiento y de la aprobación de los demás.
Si cuando te critican te molestas.
Si cuando te insultan te hieren.
Si cuando te acusan te sientes aludido.
Si cuando te ofenden te sientes humillado
Si cuando te marginan te resientes.
Entonces, no es la crÃtica la que te hiere, sino, la poca valoración que tienes de ti mismo
    Lic. David Angulo de Haro