1148 temas de desarrollo personal
La finalidad de estos temas es adquirir informaci¨®n clara y seria sobre aspectos importantes de la vida.
Los criterios claros incrementan la autoestima, la creatividad y la capacidad para tomar decisiones eficaces.
Editorial 33
El poder del pensamiento
El ser humano es como un imán magnetizado, tiene el poder de atraer y de rechazar las vibraciones. Las vibraciones positivas o negativas se expanden en todas direcciones influyendo para bien o para mal en las demás personas.
Las vibraciones forman un aura alrededor del cuerpo y ningún pensamiento negativo puede penetrar en el aura positiva. Si vibras en positivo, nadie podrá causarte daño, pero si temes o dudas de tu poder, entonces, eres vulnerable.
Existe un principio básico según el cual, el pensamiento es el principio de toda creación. Las ideas son fuerza, energÃa, acción; cuando pensamos en positivo, la energÃa es creadora, sanadora. Si nuestro pensamiento es negativo genera angustia y enfermedad. Se cree que el 90% de las enfermedades obedecen a las somatización de energÃa psÃquica negativa; por tanto, la clave de la salud y del éxito está en una programación positiva.
"El ser humano es un campo de energÃa magnética, cuanto más sensitivo se hace mejor transmisor y receptor es"
La mente produce una energÃa psÃquica formada por sustancia muy sutil, que puede trasladarse en forma instantánea, venciendo todas las barreras, desde la mente del emisor hasta la mente del receptor. Esta transferencia puede ser positiva o negativa, dependiendo de los sentimientos y de la intención del emisor.
Bernhardt descubrió que el sistema nervioso podÃa, por medio de repeticiones constantes, establecer un patrón de conducta subconsciente, capaz de producir verdaderos milagros.
Esta técnica fue aplicada en el siguiente caso: Muchas madres que trabajaban en una fábrica, regresaban muy tarde a su casa, por lo que no podÃan dar a sus hijos el afecto y los cuidados que necesitaban. Esta pobre relación entre madres e hijos dio origen a una carencia afectiva; los hijos no se sentÃan queridos. Este sentimiento comenzó a repercutir en los estudios y en la conducta. Las madres angustiadas acudieron al psicólogo de la empresa, quien les enseñó a funcionar en onda Alfa. Aprendieron a relajarse y a descender al nivel subconsciente; a visualizar sus hijos en una pantalla, a rodearles de luz blanca y a enviarles pensamientos positivos cargados de fe y de afecto. No importa si en ese momento la persona está dormida o despierta.Los pensamientos positivos penetraron en el subconsciente de sus hijos y éstos cambiaron radicalmente, porque en su interior se sentÃan queridos. Estos pensamientos, una vez grabados, permanecen activos y emiten ondas positivas que se irradian a toda la persona, produciendo un estado de paz, de energÃa, de fe...
Todos los seres humanos poseemos este poder mental, pero necesitamos liberarlo, desarrollarlo y proyectarlo en las condiciones señaladas de fe, relax y amor. Proyectarlo primero sobre nosotros y después sobre los demás.
Cómo proyectar el poder mental sobre sà mismo
1. Recordar con frecuencia todo lo que somos y tenemos.
2. Traer a la mente los mejores recuerdos de nuestra vida.
3. Hacer balance de los éxitos logrados.
4. Activar ilusiones, proyectos y esperanzas...
5. Alimentar constantemente la alegrÃa de vivir.
6. Cultivar principios y valores porque constituyen la estructura de la personalidad
7. Pensar, hablar y relacionarse siempre en positivo.
Si haces todo esto serás invencible y no tendrás que preocuparte por lo que ocurre en el mundo que te rodea. Lo que importa verdaderamente es lo que ocurre en tu mundo interno. Si tienes control sobre tus ideas y tus sentimientos serás poderoso y nada ni nadie podrá hacerte daño.
Cómo proyectar el poder mental sobre los demás
El poder mental es una fuerza que se proyecta en forma de vibraciones y llegan al subconsciente de las personas, allà se activa y comienza a influir en la dinámica mental de las personas. La fuerza o intensidad de las vibraciones depende del poder mental que tiene la persona que las emite. Las vibraciones pueden ser positivas o negativas, dependiendo de la intención de la persona que las emite.
La influencia que ejercen las vibraciones en el receptor depende de su consistencia mental. Las personas temerosas e inseguras son muy influenciables, mientras que las personas seguras están más protegidas contra cualquier influencia externa.
Como indicamos al principio, las vibraciones positivas forman un aura alrededor del cuerpo y ningún pensamiento negativo puede penetrar en el aura positiva; por tanto, si vibras en positivo, nadie podrá causarte daño, pero si temes o dudas de tu poder, entonces, eres vulnerable. La mejor protección es una buena autoestima.
Los pensamientos son decretos que tienden a convertirse en realidad , de aquà la importancia de seleccionar los pensamientos porque ellos modelan la personalidad y determinan el rumbo de la vida. Asà como piensas asà te sucede; por tanto, piensa bien y se te dará lo mejor. Sin embargo, no es suficiente con pensar, es necesario actuar y persistir en la acción.
Hoy se habla mucho de comprensión, tolerancia y perdón. Hasta hace poco estos conceptos tenÃan un cariz puramente religioso, si bien, todas las madres del mundo los han enseñado a lo largo de la historia; tal vez porque son muy intuitivas y perciben su valor. Hoy, estas conductas son apoyadas por la psicologÃa, porque ha descubierto que son necesarias para sobre vivir, para el equilibrio mental. Estas conductas ayudan a controlar los peores enemigos del ser humano. Los peores enemigos del ser humano no están fuera, están dentro y se llaman: egoÃsmo, odio, envidia, resentimiento, intransigencia...
Se necesitan muchas personas positivas que proyecten su poder mental sobre los demás. El poder mental no tiene sentido si no es para ser proyectado sobre sà y sobre los demás; asà como el sol sólo tiene sentido en la medida que irradia su luz. El dÃa que deje de irradiar será un astro muerto.
De todo lo dicho concluimos que: es necesario tomar conciencia de nuestro poder mental y aprender a controlar el pensamiento, los sentimientos, el lenguaje y las decisiones, porque ellos determinan nuestra forma de sentir, de pensar y de actuar. Somos lo que pensamos, lo que sentimos, lo que hablamos y lo que hacemos. De aquà la importancia y la responsabilidad de seleccionar los contenidos mentales y de ser congruentes con ellos..
    Lic. David Angulo de Haro